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Mamá, quiero ser artista

Un centenar de niños asistió ayer en Sevilla al casting de la nueva temporada de ‘Menuda Noche’, el programa de Juan y Medio en Canal Sur Televisión.

el 02 sep 2010 / 19:34 h.

En busca de nuevos artistas llegó ayer a Sevilla el casting para la séptima edición del espacio Menuda Noche, que suele ocupar el prime time de los viernes en Canal Sur Televisión.

La cita, a partir de las 16.00 horas en el Hotel Iberostar, en el Estadio Olímpico, con la fresquita que estaba cayendo en ese momento en la capital andaluza, se preveía tranquila. Pero simplemente se preveía.

A la media hora comenzaron a llegar los menudos aspirantes acompañados de sus padres. En total, 100 niños sin vergüenza y con mucho sentido del humor que iban rellenando una ficha nerviosos porque no sabían lo que les esperaba.

Allí estaba Raúl, el coordinador de casting del programa de Juan y Medio. "Vienen a jugar. Nosotros no les presionamos. Ahora entrarán en grupos de 15 niños donde nos mostrarán cómo son y hablarán de su propio universo". En definitiva, sumergidos en su mundo de frescura, ingenio e inocencia.

Laura (Morón de la Frontera), una niña de 9 años, asegura haber llamado ella misma cuando se enteró del casting: "Yo misma llamé porque quiero conocer a Patito y a Juan y Medio".

Menuda Noche es un espacio familiar y de entretenimiento donde tienen cabida distintas secciones en la que los niños son los protagonistas. Llevan las riendas del programa entrevistando a artistas invitados, dando su opinión sobre temas de actualidad y relatando sus anécdotas más simpáticas.

La inocencia, la frescura y la espontaneidad de los niños andaluces son algunas de las claves que han hecho que Menuda Noche triunfe, enganche y siga en la televisión pública andaluza desde hace ya seis temporadas.

"Buscamos a niños entre 2 y 13 años con desparpajo, con sentido del humor y que en definitiva sorprendan al espectador", dice de carrerilla Raúl. Tras Huelva, Cádiz y Málaga, el casting llegó a Sevilla sin otra finalidad que la de pasarlo bien y huir de cualquier forma de competitividad entre los pequeños.

Brindando la oportunidad a numerosos niños andaluces de desarrollar sus habilidades en televisión, la productora ZZJ hace hincapié en la sección Escuela de artistas, donde cada semana un personaje famoso es el objetivo de los más pequeños de este espacio y acude al plató para someterse a la entrevista que le realizan los niños con su particular ingenio.

"Queremos niños que puedan tener alguna habilidad especial, con aficiones originales, alegres, listos, extrovertidos, que sorprendan y que tengan verdadera ilusión", afirma el coordinador.

Así podría ser Sara, una pequeña de 5 años que dice que no le hace falta la música para cantar y bailar porque tiene el ritmo dentro. Su propia madre lo corrobora entre carcajadas: "Es un manojo nervios. Canta por Shakira... La canción La loba le sale de maravilla. Le he traído el cedé pero me ha dicho que ella no lo necesita".

Otro caso es el de Celia Gamoza, de 7 años, que dice con desparpajo que "bailo y canto todo lo que me echen, quiero sentarme en esas escaleras...". "Espero que sea verdad y no le dé vergüenza cuando entre a demostrarlo", apostilla su madre.

La música y los chistes están siempre muy presentes en Menuda Noche con actuaciones musicales tanto de invitados como de críos que se están introduciendo en el mundo del espectáculo u otros que quieren sorprender a familiares y amigos.

En este apartado hay que reparar en Rafael, de Dos Hermanas, que lleva incluso a su propio guitarrista para demostrar que el flamenco es su pasión. "He cantado en Los Palacios, vengo de actuar en Lebrija. Ya sé lo que voy a cantar, espero no tener nervios dentro, aunque aquí fuera sí los tengo".

Y si de hacer reír se trata, Aitor y Yeray Román, 4 y 7 años respectivamente (Burguillos), son expertos en chistes: "Éste es uno de Sevilla que le dice a su amigo de Lepe: ¡Quiyo!, pero ¿tú por qué metes el periódico en el frigorífico?, ¿Que por qué? ¡Para que las noticias sean frescas!".

Todos quieren tener su momento y los padres les conceden ese capricho. "Yo no quiero vivir de mi hijo; vamos, que si hago esto es por él. Quiero que viva esta experiencia porque me lo ha pedido, pero no porque vaya a ganar dinero con él. Prefiero que estudie", afirma la madre de estos dos pequeños por si alguien pudiera tener suspicacia.

Lo corroboran desde la productora, advirtiendo que ningún padre se puede lucrar con esto "porque sólo les pagamos los traslados, no hay más". Y se agrega que el programa, pese a ser semanal, interfiere mínimamente en la formación académica de los pequeños porque se buscan fórmulas para ello. Los niños ya sueñan con conocer a Juan y Medio.

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