Más de 2.000 personas, según la organización, se han manifestado en la tarde de este sábado en apoyo a las familias del bloque de viviendas ocupado en la avenida de las Juventudes Musicales, junto a la glorieta de San Lázaro, de Sevilla, que han caminado desde el Prado de San Sebastián hasta el Parlamento andaluz para reclamar una solución a estas personas.
Así, la manifestación, que ha contado con la asistencia de la plataforma de apoyo a la Corrala Utopía y representantes políticos, según ha informado uno de los portavoces de las familias a Europa Press, ha arrancado con 500 personas, a las que se han ido uniendo a lo largo del recorrido más personas, hasta alcanzar una cifra de entre 2.000 y 3.000 manifestantes.
Así, la misma fuente ha señalado que la manifestación ha transcurrido sin incidentes. De la misma manera, ha afirmado que han realizado una parada frente a una sede de Ibercaja, propietario del edificio que ocupan las familias, para reclamar un acuerdo con los dirigentes de la caja de ahorros.
Por último, ha señalado que durante la manifestación han realizado un llamamiento a la Consejería de Fomento y Vivienda para que logre arreglar la situación.
Cabe recordar, que este viernes se produjo una reunión entre una representación del colectivo de familias, la Junta de Andalucía y el titular de la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, y en la que se ausentó la entidad titular de las viviendas, para alcanzar un acuerdo que resuelva el conflicto, por lo que el encuentro no arrojó grandes avances.
LA 'CORRALA UTOPÍA' Estamos hablando del colectivo de familias que habita sin relación contractual alguna el bloque de viviendas de renta libre ubicado en los números dos, cuatro y seis de la avenida de las Juventudes Musicales. Si bien la pasada primavera mediaba un principio de acuerdo entre estas familias y la propiedad del edificio; 'Ibercaja' a través de la sociedad limitada 'Residencial Murillo', el banco solicitó de nuevo el "desalojo forzoso" de las viviendas bajo la premisa de que las familias no se habrían atenido a los términos del pacto.
El citado principio de acuerdo implicaba la búsqueda de fórmulas para que las familias que acreditasen un estado de verdadera "necesidad" fuesen realojadas "en otras viviendas", el desalojo "efectivo" y voluntario de las viviendas ocupadas, la suspensión de la petición de medida cautelar de desalojo y el "desestimiento del proceso penal instado" contra las familias. Merced a este acuerdo, la propiedad del edificio había pedido al juzgado "que no se acuerde la medida cautelar de desalojo solicitada", si bien como se ha señalado la petición de desalojo forzoso fue reactivada a cuenta del nuevo desacuerdo surgido entre las partes.
La propiedad de los inmuebles, como es sabido, propone a estas familias su programa de respaldo al alquiler de viviendas 'Llaves solidarias", incluido en la obra social de 'Ibercaja'. Este programa, destinado a familias de bajos ingresos, tiene por objeto facilitar el acceso a la vivienda de alquiler a familias con dificultades para acceder a este mercado. Se trata, según 'Ibercaja', de "garantizar unos precios sociales que permitan acceder a una vivienda de alquiler a personas con dificultades y necesidades específicas en materia de alojamiento".
