Hasta ahora, salvo alguna excepción, el desarrollo de las energías renovables había sido escaso en Mairena del Alcor y venido de fuera. Pero es una realidad que empieza a cambiar con el nacimiento de Enertop, una división de la empresa de ingeniería Radiomet.
Esta empresa, que se encarga del desarrollo de proyectos de energía renovable, se estrena en el municipio con un huerto solar patrocinado por el Ayuntamiento de Mairena del Alcor. Se trata de la instalación de una planta solar fotovoltaica de 32,7 kilovatios sobre la extensa cubierta de la Villa del Conocimiento y las Artes del pueblo, cuya electricidad generada será puesta a la venta para inyectar en la red.
Pero no es el único encargo, ya que Enertop trabaja también en dos proyectos similares más: un huerto solar de 19,2 kilovatios que posará sus placas sobre la cubierta del edificio Godosan, y otro sobre las inmensas techumbres de las naves de Cereales Gómez, con una potencia generadora de 44,62 kilovatios.formación. La empresa, dirigida por Javier Jiménez Campuzano, viene trabajando desde el pasado verano en la formación, de cara a la universalización de las energías renovables. Para ello, colabora con la escuela taller, a la que cedió para prácticas de sus alumnos una maqueta de cinco paneles fotovoltaicos.
Ello, junto a unas jornadas en los campos teórico y práctico, que fueron impartidas por personal de Enertop, sirvieron de paso para aleccionar a los jóvenes del módulo de energías renovables, particularmente en los apartados generales técnicos, uso y montaje de paneles. La maqueta de prácticas quedó cedida a la escuela taller para usos posteriores.
Es objetivo de Enertop es hacer partícipes a los ciudadanos de las ventajas de las energías renovables, que la empresa considera el soporte del futuro por su escaso efecto contaminador para el planeta. De ahí, que el pasado mes de julio realizara con éxito una exposición en el centro comercial Los Alcores.
El temido cambio climático vaticinado por los expertos y la necesidad de cumplir con el Protocolo de Kyoto laten sobre el fondo del asunto como idea altruista, pero hay más, pues a la vez se sopesa el más prosaico factor empresarial de los beneficios, como ocurriría en cualquier empresa. Pero con un compromiso.
