Está previsto que antes del verano se termine de construir la planta de transferencia para el tratamiento de basuras, uno de los proyectos más ambiciosos de la Mancomunidad de Municipios de la Comarca de Écija, volcada desde hace unos años en la creación de infraestructuras para la mejora medioambiental.
Para sus promotores, la planta de transferencia es una apuesta medioambiental que sustituirá al vertedero abierto en 1998, y que permitirá el tratamiento de los residuos sólidos urbanos procedente de los cinco municipios que forman la institución (Écija, Fuentes de Andalucía, La Campana, La Luisiana y Cañada Rosal). Se trata de darles un tratamiento a los desechos en lugar de simplemente enterrarlos.
En la planta de transferencia, la basura se clasificará "y luego se triturará y compactará, para trasladarla a una central de reciclaje en Estepa, para aprovecharla en la medida de lo posible", especificó Javier Fernández Berrocal, gerente de la institución. De este modo, gran parte de las basuras saldrán fuera de la comarca. Costará cerca de un millón de euros pagados por la Junta de Andalucía.
