Pavone está muy mal físicamente.
Mariano Pavone ha estado entrenándose como uno más esta semana y su presencia junto al grupo invitó a pensar que sus problemas por fin se habían acabado y que podría viajar a Villarreal, pero no es así. El delantero argentino, víctima de un sinfín de pequeñas lesiones en las últimas semanas e inédito desde hace un mes (el 7 de marzo jugó 35 minutos ante el Rayo), se ha resentido de tanto parón y tanto entrenamiento perdido y su forma física ahora mismo no es la más adecuada para el fútbol de competición, así que el cuerpo técnico le ha diseñado un plan específico de quince días cuyo objetivo es mejorar su estado e intentar que pueda ayudar al equipo en la recta final de la temporada. En principio no irá a Villarreal, eso seguro, y con casi toda seguridad tampoco podrá enfrentarse al Cádiz, a no ser que la plantilla sufra algún tipo de merma en su nómina de atacantes y Víctor no tenga más remedio que tirar del suramericano.La iniciativa partió del jefe de los servicios médicos, Tomás Calero, después de comprobar que Pavone no rendía como debía en el entreno del jueves. Lo consultó con el jugador, le propuso organizar una especie de minipretemporada y tras obtener su visto bueno se dirigió al técnico para consensuar el plan. "Tiene unos problemas que no terminan de desaparecer y vamos a afrontar con máximo rigor y seriedad un plan para el futbolista porque hay que eliminar esos problemas físicos. Es un jugador importante con el que me gustaría contar y no puedo", explicó Víctor ayer.
La base de este plan específico es que Pavone pierda peso y gane fuerza y chispa. "O lo hacemos así o se nos puede caer otra vez", advierte Calero. Lo de "otra vez" viene que ni pintado porque el argentino ya ha tenido problemas de tendón, de tendinitis, de aductor, contusiones...
PRUDENCIA CON NELSON. Otro caso que inquieta a Víctor, porque le encantaría contar con él y tampoco puede, es el de Nelson, de baja desde hace dos meses por un golpe en su rodilla. "Tiene una contusión ósea importante y todavía no ha reabsorbido la inflamación del hueso, así que existe riesgo de una microrrotura. Hasta que no baje el edema no puede entrenarse con normalidad", detalla el médico.
La buena noticia del parte es para Capi, que ya hace carrera continua. El técnico creía que podría estar para mañana y no ha podido ser, pero el canterano sí reaparecerá ante el Cádiz.
