Hoy es 8 de abril y el día no tiene ninguna significación especial para el Betis, pero para Mariano Pavone sí puede ser una fecha muy significativa, aunque él posiblemente ni sea consciente.
Hoy es 8 de abril y se cumplen cinco meses exactos y una vuelta entera de competición sin que el argentino haya marcado un solo gol, un dato preocupante cuando de un delantero se trata.
Tal día como hoy hace cinco meses, en el minuto 76 del Cádiz-Betis de la undécima jornada, Pavone hacía el 1-2 provisional al batir con solvencia a Kiko Casilla con un buen trallazo después de ser habilitado por Capi.
Era la quinta diana del ariete verdiblanco, que se colocaba a un solo tanto del pichichi del equipo, Sergio García, pero desde entonces, nada de nada.
Pavone ha participado en trece de los veintiún partidos que ha disputado el Betis a partir de aquel 8 de noviembre (incluido el aplazado contra el Villarreal B) y nunca más ha vuelto a ver portería.
Es un caso extraño el del punta bético. El pasado verano, Antonio Tapia lo convenció de que sería un hombre fundamental en su dibujo, así que olvidó su antigua pretensión de regresar a Argentina, realizó una pretemporada en condiciones y empezó la campaña como titular indiscutible.
Cuando acabó el encuentro del Carranza, su aportación estaba siendo sobresaliente: en diez partidos había marcado cinco goles, había dado seis asistencias, había formado parte siempre de la alineación inicial y rara vez había sido sustituido.
La racha se terminó aquella tarde gaditana. No perdió la titularidad de un día para otro, como es natural, y de hecho Tapia no lo mandó al banquillo hasta la decimoquinta jornada, en Murcia, pero su relevancia en el colectivo fue disminuyendo a una velocidad increíble.
Pavone lo sintió y la prueba es que entre las jornadas 14ª y 19ª jugó cuatro partidos y en todos ellos vio tarjeta amarilla. En la última jornada de la primera vuelta, y última también de Tapia en el Betis, Pavone disfrutó de la titularidad por última vez.
Peor aún con Víctor Fernández
El cambio de entrenador dejó a Pavone peor incluso de lo que estaba. Con Víctor Fernández no sólo no ha estado en el once ni una vez, sino que apenas ha jugado 104 minutos repartidos.
Cuando se cerró el mercado invernal, una vez frustrado su traspaso al Catania, el técnico dijo que ahora "sí" veía a Pavone "aprovechable", pero los hechos dicen otra cosa. El argentino tuvo 21 minutos ante el Hércules, 19 en Huelva, 29 contra el Albacete, 35 frente al Rayo... y para de contar.
El atacante no ha vuelto a jugar desde ese 7 de marzo y ahora, encima, está en plena pretemporada particular porque su forma no es la más adecuada.
Los técnicos, en todo caso, aún confían en que Pavone sea importante en el tramo final del curso, cuando falte Emana. Mientras tanto, sus compañeros no paran de adelantarlo por la derecha. Después de Cádiz, Pavone era el segundo goleador del Betis.
Ahora es el cuarto: el primero que lo adelantó fue el último en llegar, Jonathan Pereira (seis goles ya), y el lunes lo superó Emana (también con seis). Hasta su compatriota Caffa lo ha igualado después de su extraño tanto de falta en Villarreal.
