La comunidad de propietarios de la urbanización Sector Triángulo, en Montequinto, ha iniciado una serie de protestas para que el Ayuntamiento les devuelva los dos pisos piloto en los que ahora se ubica la biblioteca quinteña. Y es que, según los vecinos, el edificio debería haber vuelto a sus manos en 2007.
Los vecinos de la urbanización se enteraron por la prensa de que el Ayuntamiento pretendía hacer la nueva biblioteca en estos terrenos, de 220 metros cuadrados. Al percatarse del plan municipal, solicitaron que les devolvieran su propiedad, que fue cedida al Consistorio 14 años mediante un acuerdo verbal, pero que prescribió en mayo de 2007.
Los vecinos pretenden instalar en ese espacio la sede de la comunidad, ya que actualmente alquilan las instalaciones del colegio de Los Escolapios para hacer sus reuniones. Con idea de forzar al Consistorio a tomar una decisión, hoy celebrarán su segunda manifestación, algo que repetirán todos los martes de este mes. Si no son escuchadas sus demandas, en diciembre buscarán otras alternativas, incluso la denuncia ante los tribunales si los residentes lo consideran oportuno.
Los vecinos, según la presidenta del Sector Triángulo, Virginia Luque, han intentado llegar a un acuerdo con el Consistorio para que prorrogara la cesión a cambio de unas mejoras en las los viarios del barrio, que estaban muy deteriorados después de tres lustros sin arreglos. Luque reconoce que "casi el 80% de los propietarios son gente joven, que no estaba hace 15 años, por eso no sabían que eso era propiedad de los vecinos", afirma, al tiempo que asegura que tiene el respaldo de las casi 1.500 personas que viven en el Sector Triángulo. Luque afirma que desde la oficina municipal en Montequinto les han dicho, que aunque la biblioteca se vaya antes, se tirarán los dos pisos, una amenaza que no preocupa porque "lo que vale es el terreno, no el edificio".
Los vecinos se quejan de que hasta la fecha no han obtenido respuesta por parte de la administración local, tan sólo algunas reuniones con el concejal de Urbanismo, José Manuel Carrión, que siempre les ha dicho que al tratarse de una urbanización privada no pueden arreglar los viarios del barrio. Incluso, según afirma Luque, el Ayuntamiento reconoce "por escrito" que no tiene ningún papel que diga que el terreno es suyo ni nada relacionado con el acuerdo.
Por su parte, el portavoz del gobierno local, Agustín Morón, dijo desconocer si el acuerdo con los vecinos había prescrito o no, pero que, en cualquier caso, el Ayuntamiento no tiene intención de hacer nada. "La biblioteca se quedará allí hasta que se construya la nueva y entonces ya veremos lo que hacemos", declaró.
