Fue el primero José María del Nido en reclamar la atención para un partido que no gusta en la expedición sevillista, sobre todo teniendo en cuenta la mala experiencia con el Parma. Por otro lado, sacó pecho por la situación del equipo y aclaró que las negociaciones por Capel están paradas.
"Nos la jugamos". Esta fue la primera expresión del dirigente nervionense antes de montarse en el avión que llevó a los expedicionarios en un plácido vuelo a la capital de la Liguria. "Será un partido dificilísimo y tenemos que ver al mejor Sevilla, porque si no lo vamos a pasar mal. En Italia siempre se pasa mal. Somos conscientes de la ilusión que esta competición nos hace y de la necesidad imperiosa que tenemos de pasar esta eliminatoria.
El equipo está en un buen momento de forma y juego, pero éste es de los clásicos partidos trampas", explicó Del Nido, que precisamente recordó que "la última experiencia negativa" en la UEFA "fue en Italia". Por todo ello, vaticinó un partido "duro, con un rival que sabe mantener la portería a cero, rocoso. A todo rival italiano hay que tenerle el respeto necesario como para saber que si no se está al mejor nivel y no se implica al 100% muy pocas posibilidades se tendrá de pasar".
Dejando su preocupación por el encuentro de esta noche a un lado, también se refirió el dirigente nervionense a la Liga, y aprovechó para sacar pecho por el proyecto del equipo: "Hemos tenido buenos momentos. Es evidente que aquellos que no apostaban por este proyecto tienen ahora ocasión para rectificar y ver que hay plantilla". Con todo, remarcó que el objetivo sevillista es quedar "entre los cuatro primeros" y que "la presión añadida no corresponde" al Sevilla.
Por último, y sobre todo tras el cierre de la ampliación y mejora de contrato de Adriano Correia, fue cuestionado Del Nido por las negociaciones que mantiene el club con los agentes de Deigo Capel, que también pretende mejorar sus condiciones: "Las negociaciones están absolutamente estancadas, hace diez días que no hablamos del tema y no creo que lo volvamos a hacer en el curso de la competición. Tiene dos años y medio de contrato y no tenemos ninguna prisa en acelerar unas negociaciones que nosotros no hemos parado".
