En el extremo del tablón de un barco pirata, a punto de caer a un mar infestado de tiburones. Así dibujaron ayer los grupos del Congreso al presidente del Gobierno. Rajoy está seguro de que al Gobierno le quedan seis meses de vida y el PNV cree que Zapatero no acabará la legislatura.
Tanto gustó la imagen del barco pirata, con la que el portavoz de ERC, Joan Ridao, quiso escenificar la delicada situación por la que atraviesa el Gobierno para lograr apoyo mayoritario en el hemiciclo, que el propio líder del PP, Mariano Rajoy, le espetó después a Zapatero: "Así no aguanta usted, ni la economía española, más de medio año". "Mucha gente le pide un cambio de política económica, incluso Krugman", dijo Rajoy, aludiendo a la reciente visita del Premio Nobel de Economía 2008, quien, ironizó, "debió de quedar alucinado" cuando Zapatero le entregó el Plan E (Plan de Estímulo de la Economía y el Empleo).
Es decir, que Rajoy ya intuye al presidente engullido por los escualos; de hecho, Ridao advirtió al jefe del Ejecutivo de que si no atiende a las demandas de los catalanes se le va a acabar el "salvavidas" que en otros momentos le prestó ERC.
La sesión de control en la Cámara Baja se ocupó, una semana más, de la crisis económica, pero también del nuevo panorama que el resultado electoral vasco deja en el Parlamento, ya que el PSOE no puede contar con un PNV muy enfadado por la certeza de que, gracias al PP, el socialista Patxi López será el próximo lehendakari. Ante las reservas hacia el Gobierno de ERC, cuyo portavoz también está molesto por los "incumplimientos" de los socialistas con Cataluña, Zapatero exhibió una vez más su mejor optimismo y confió en que su proyecto "progresista" saldrá adelante.
También desde el PNV creen que el presidente está en dificultades. El portavoz nacionalista en el Congreso, Josu Erkoreka, dijo que la posibilidad de que Zapatero acabe la legislatura es "cada vez más difícil" al tener unos apoyos "cada vez más precarios" y en un contexto de crisis económica, de la que el Gobierno "acabará siendo responsable en buena media".
izquierda. Ante la falta de apoyos, el Gobierno de Zapatero ya está buscando soluciones. El diputado de IU en la Cámara Baja, Gaspar Llamazares, aseguró ayer que el PSOE se ha comprometido a reunirse con IU-ICV todas las semanas para preparar las votaciones del Congreso, tanto en pleno como en comisión, con idea de tener claros los temas susceptibles de negociación, saber los que se aprobarán y se rechazarán, y evitar "tómbolas" como las que en su opinión han tenido lugar en las últimas sesiones plenarias.
Llamazares explicó que el Gobierno mantiene su apuesta por la "geometría variable" de negociar cada punto con los interlocutores que le sean más favorables y le recomendó que opte por la "aritmética" de los apoyos estables. "Debe aclarar su línea y dejar de zigzaguear", proclamó.
