El Sevilla vive días de vino y rosas. Ante el Realísimo logró batir su récord histórico de victorias seguidas: sumó la sexta, dejó a los merengues prácticamente sin Liga, se situó a seis puntos de la Champions y elevó al olimpo a futbolistas como Rakitic, Bacca o el mismo Beto, discutido otras tardes y que con sus sensacionales paradones sostuvo a su equipo en la primera mitad, en la que los madridistas apretaron de lo lindo pero solo pudieron anotar merced a un gol de rebote curiosamente de Bacca, autor de los tres, pues el guardameta luso estuvo sencillamente impresionante.
Tras el descanso, el impecable planteamiento de Unai Emery otro que estaba en el ojo del huracán hasta hace escasas semanas funcionó a la perfección. El Sevilla supo aguantar con orden y cabeza fría las acometidas merengues y soltó una contra letal para dejar al Madrid sin media liga y a los nervioneses, lanzados por la Champions. Quién lo iba a decir hace seis jornadas. Pero es lo que tiene ganar seis partidos seguidos y contar en tus filas con un fenómeno como Ivan Rakitic. Lo que hizo ayer le va a costar mucho dinero al presidente Pepe Castro, que aún no ha sellado la renovación del croata. Le hizo a Pepe un sombrero de tacón en medio campo y, tras una fenomenal carrera, dio una asistencia de crack mundial a Bacca para que anotara el 2-1 y dejara al Madrid malherido y sin argumentos para levantarse.
VALIENTE UNAI. Sevilla y Madrid arrancaron el choque a tope de revoluciones. Emery optó por una alineación muy valiente, juntando arriba a Reyes, Rakitic, Marin y Bacca, mientras que Ancelotti cubrió la baja de Di Maria con Illarramendi para asegurarse el control del medio campo, lo que logró desde el pitido inicial.
El laboratorio sevillista ya pudo funcionar antes del minuto de juego, en una jugada de estrategia Rakitic-Iborra que no remató Fazio en la boca de gol porque se le adelantó Illarra por centésimas de segundo. A raíz de ese primer aviso el Madrid apretó de lo lindo y empezó a poner a prueba los felinos reflejos de Beto, en perfecto estado de revista. Xabi, Modric e Illarra apenas dejaban oler el balón a los sevillistas y las ocasiones comenzaron pronto a sucederse. Bale y Benzemá protagonizaron las cuatro primeras y el gol llegó a la quinta, en una falta desde fuera del área botada por Cristiano que rebotó en el brazo de Bacca y despistó por completo a Beto.
Octavo gol de CR7 en su cuarta visita al Pizjuán. El panorama se ponía negro. Pero ahí surgió la calidad por la que había apostado Emery y, solo cuatro minutos después, una pérdida de Xabi Alonso en medio campo la explotan a la perfección Reyes y Bacca pra que el colombiano fusile a Diego López tras una gran asistencia del utrerano, que está finísimo y en gran momento.
El Madrid acusó el golpe. El partido se equilibró y a los de Ancelotti les costaba más ir apareciendo por las cercanías de Beto, pero gracias a su tremenda calidad acabaron consiguiéndolo un puñado de veces, aunque siempre estuvo presto el meta sevillista para responder y mantener a su equipo en pie ante las embestidas merengues. Lo hizo ante su compatriota Cristiano, hasta tres veces la última con ayuda del poste y otra ante Bale, al que repelió un remate a bocajarro.
El Sevilla tuvo también una buena ocasión para hacer el 2-1, por medio de Reyes tras triangular con Marin y Bacca.
Las espadas, al descanso, estaban en todo lo alto. El Madrid triplicaba en remates y ocasiones al Sevilla, pero en el marcador el 1-1 reflejaba máxima igualdad. Lo mejor estaba por llegar. Tras el descanso el Madrid no fue el mismo. Sufrió lo indecible y, encima, se encontró con un Rakitic imperial y un Bacca matador ante el gol. Y ve cómo la Liga que parecía tener en el bolsillo se le esfuma en cuatro días.
Sevilla 2 Madrid 1 por jordixana
