Armando Palomino, con una copia del recurso presentado ayer.
Nuevo sobresalto en la hermandad del Dulce Nombre. Armando Palomino García, el candidato que resultó vencedor en las elecciones celebradas el pasado 13 de noviembre, ha interpuesto ante el vicario general un recurso jeráquico en el que solicita la nulidad del decreto de Palacio que impone la figura de un comisionado en la hermandad al entender que dicho decreto es "contrario al ordenamiento jurídico canónico" .El recurrente entiende que el decreto de Palacio, firmado el 16 de diciembre por el delegado diocesamo de Asuntos Jurídicos, Isacio Siguero, es "nulo de pleno derecho por emanar de una autoridad manifiestamente incompetente con arreglo a lo establecido en el Código de Derecho Canónico", ya que, según expone, "la supresión, modificación, cambio y, en general, alteración de los estatutos de una asociación pública de fieles (...) requieren un decreto dictado directamente por el propio obispo diocesano".
En sus exposición de motivos, Armando Palomino también reclama la nulidad de lo decretado por Palacio "por falta de audiencia a parte interesada" ya que, en ningún momento, asegura, se le ha dado traslado de algún tipo de denuncia o impugnación contra los resultados electorales, lo que le ha impedido realizar posibles alegaciones.
En el recurso, presentado en el registro de entrada del Arzobispado en la mañana de ayer, el compareciente se queja de la negativa de la autoridad eclesiástica a entregarle siquiera una copia del decreto de Isacio Siguero, lo que considera que vulnera sus derechos y le impide "el normal ejercicio de su razonable disconformidad".
"Ello sabrán el porqué de tal negativa, pero lo cierto es que conculca el más simple de los principios de la seguridad jurídica -que también debe existir en la Iglesia, pues para eso tiene su propio derecho- que no sólo no se oiga a un más que seguro afectado por la resolución, sino que tampoco se le quiera dar el texto donde se le despoja de lo que la hermandad en cabildo le ha otorgado", razona el escrito.
Por último, el recurrente considera que no existen "motivos pastorales" que justifiquen la imposición de un comisionado sine die en la hermandad, ya que en caso de que realmente existieran no se podría entender que la autoridad eclesiástica no hubiese tomado antes cartas en el asunto en evitación de males mayores y, sin embargo, venga a adoptar una determinación "precisamente, tras la celebración de un proceso electoral bajo su tutela".
Por todo ello, el recurso interpuesto ante el vicario suplica la nulidad del decreto referido y, consecuentemente, la "suspensión" de sus acuerdos "por las graves consecuencias que puede producir a la hermandad la intervención de la misma".
En declaraciones a este periódico, Palomino asegura que, una vez abierta esta causa judicial, llegará "hasta el final" para limpiar el honor de la personas que le acompañaban en su candidatura, "padres de familia que iban en mi equipo y que hemos quedado como unos sinvergüenzas".
Armando Palomino fue proclamado hermano mayor electo según consta en el acta del cabildo de elecciones del pasado 13 de noviembre, después de imponerse en unas reñidas votaciones a su oponente, Joaquín García-Tapial, por un total de 27 votos de diferencia, un escrutinio que "en mi hermandad supone una goleada", manifesta.
