Si el pasado miércoles una escultura de Dalí era sustraída de una exposición en la ciudad belga de Brujas, ayer le tocó el turno a un cuadro de Van Gogh. La obra Las amapolas, rubricada por el reconocido pintor holandés, fue robada por la mañana del museo Mohamed Mahmud Jalil de El Cairo, en Egipto.
Según informó el ministro de Cultura egipcio, Faruk Hosni, la pintura fue sacada de su marco a primera hora de la mañana, poco después de que abriera sus puertas esta prestigiosa pinacoteca emplazada en la ribera oeste del Nilo. Se trata de una obra de inestimable valor, tasada en cerca de 50 millones de dólares (39 millones de euros).
El titular de Cultura anunció también, en un comunicado difundido por la Oficina de Información de su ministerio, que se ha abierto una investigación administrativa con todos los responsables del museo y con los directivos del departamento de Artes Plásticas del ministerio. Además, los cuerpos de seguridad han activado controles en aeropuertos, pasos fronterizos y puertos marítimos para que el cuadro no salga de Egipto.
Los agentes empezaron ayer mismo a recoger huellas dactilares en la zona del robo para identificar a los culpables del hurto, según añadió el asesor de Información del Ministerio de Cultura, Ayman el Qady. Se rastrea toda la ciudad y sus principales avenidas en busca de cualquier pista que lleve hasta los ladrones. También se ha solicitado la colaboración ciudadana por si alguien pudo haber visto algo sospechoso que ayude a esclarecer el robo.
El florero con las amapolas rojas fue pintado por Vincent Van Gogh en 1886 en París y representa un ramo de flores rojas de la amapola. El rojo es el color del amor y del romance. Es una pintura al óleo real, no una impresión o transferencia.
La pieza es conocida por dos títulos de Florero y flores y Las amapolas, y se encuentra en este reconocido museo, junto a otras obras artísticas de grandes maestros, como Gauguin, Renoir, Degas, Cezanne, Monet y Rodin.
El museo del Cairo es un palacio de gran valor arquitectónico. Fue construido en el año 1920, y en él residió Mohamed Mahmud Jalil, destacada figura política y cultural de Egipto de los años sesenta y setenta del siglo pasado, que fue presidente del Senado y de la Asociación de Aficionados de Bellas Artes del país. En la actualidad recibe centenares de visitas al año, y cuenta con un sofisticado sistema de seguridad, que, en esta ocasión, no ha evitado el hurto del cuadro de Van Gogh.
Se da la circunstancia de que es el segundo robo que se produce de una obra de arte en menos de una semana, después de que el miércoles pasado fuera sustraída una figura de bronce del artista español Salvador Dalí (Mujer con cajones), a plena luz del día de una exposición que se celebraba en Brujas (Bélgica). La Policía busca aquí también indicios a través de los vídeos de las cámaras de vigilancia. Se calcula que la escultura de Dalí robada tiene un valor de 100.000 euros.
Prolífico. Van Gogh es uno de los principales exponentes del posimpresionismo. Pintó 900 cuadros (de ellos 27 autorretratos y 148 acuarelas) y 1.600 dibujos. La figura central en su vida fue su hermano menor Theo, quien continua y desinteresadamente le prestó apoyo financiero.
La calidad de su obra sólo fue reconocida después de su muerte, considerándose uno de los grandes maestros de la pintura. Tuvo una gran influencia en el arte del siglo XX, especialmente entre los expresionistas alemanes y los fauvistas como Derain, Vlaminck y Kees Van Dongen.
Por medio de numerosas reproducciones (láminas, carpetas, vasos, relojes....) muchas de sus obras son muy conocidas, y se encuentran profundamente enraizadas en la consciencia artística general y mantienen su actualidad en todo el mundo.
