El Betis venció a Osasuna y se colocó en una situación envidiable en el primer capítulo de su, ahora sí, pelea por regresar a las competiciones europeas gracias al doblete de su indiscutible pareja de goleadores. Rubén Castro y Jorge Molina, Jorge Molina y Rubén Castro, que tanto monta, dieron su enésima lección de eficacia y siguen consolidándose como uno de los dúos más prolíficos de la historia del club verdiblanco. Dentro de muchos años serán recordados así. Adía de hoy toca el análisis coyuntural y ya en él deben abundar los elogios. Entre los dos han aportado 104 goles a la causa verdiblanca en estas dos temporadas y media a su servicio, 64 del canario y 40 del alcoyano, y además con un nivel muy alto de eficiencia.
Esta temporada, Rubén ha jugado 1.960 minutos de Liga y ha hecho 13 goles, así que asegura uno cada 150 minutos. Molina es más o menos igual de productivo, ya que ha disputado 1.577 minutos y ha celebrado 9 tantos, de modo que su promedio es de uno cada 175 minutos. En otras palabras, los dos garantizan que marcan al menos una vez cada menos de dos partidos. Huelga decir que son la mejor pareja nacional de la Liga, ya que sus 22 goles baten por goleada a los 17 de los bilbaínos Aduriz (12) y De Marcos (5), los 16 de los sevillistas Negredo (13) y Reyes (3) o los 15 de los valencianistas Soldado (13) y Viera (2).
Lo que parece mentira es que ambos hayan marcado en el mismo partido de Liga sólo once veces desde que están en el Betis. En Segunda lo lograron en seis ocasiones, pero se ve que tardaron en ponerse de acuerdo. La primera fue en la 16ª jornada, en un 3-1 ante el Córdoba, y la siguiente en la 28ª, un 4-1 ante Las Palmas. En el tramo final, la compenetración ya era máxima y volvieron a repetir en la 34ª (5-0 ante el Cartagena), la 35ª (0-3 ante el Barça B), la 40ª (3-1 contra el Huesca) y la 41ª (3-3 frente al Alcorcón). El Betis ganó cinco de esos seis envites.
En la pasada temporada, ya en Primera, no coincidieron goleando en ningún choque de Liga (sí en el partidazo de Copa frente al Getafe), así que ha habido que esperar a esta campaña para que los dos mejores delanteros verdiblancos canten gol al fin en la misma jornada en la máxima categoría. El estreno fue en el día inaugural, en el 3-5 ante el Athletic en San Mamés; el canario convirtió uno y el alcoyano hizo doblete. Luego tocó en el 2-4 en el campo del Getafe, con una diana por cabeza. La penúltima vez fue en La Romareda, en el 1-2 sobre el Zaragoza, aunque ese día marcó Rubén cuando su compañero no estaba aún en el campo. Desde ese 4 de enero no había vuelto a producirse el doblete simultáneo, pero el viernes se acabó la racha. Y además fue en el estadio Benito Villamarín, donde los béticos no veían marcar a sus dos arietes a la misma vez, como diría aquel, desde el 21 de mayo de 2011 (3-1 frente al Huesca).
