El parlamentario de IU por Sevilla, Juan Manuel Sánchez Gordillo, se ha negado a donar a su partido los 1.000 euros que éste le ha pedido a sus diputados para sanear las cuentas de la coalición de izquierdas. Sánchez Gordillo es también líder del CUT-BAI, y asegura que ahora su prioridad son las finanzas de esta organización y del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT). Además añade que, como parlamentario de IULV-CA ya le descuentan de sus retribuciones un montante de 1.000 euros cada mes.
La coalición que lidera Diego Valderas desarrolla una campaña de financiación extraordinaria ante la "debilidad financiera" de la formación y la necesidad de "sanear" sus cuentas, con el objetivo de recaudar en tres meses un total de 350.000 euros. Sánchez Gordillo dijo a Europa Press que si IU "está pelada, más pelada está la CUT-BAI".
El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, indicó que se trata de una campaña de largo alcance y que, hasta el momento, no hay resultados de su evolución. En un documento interno, la Secretaría de Finanzas de IU asegura que durante los dos últimos años la organización ha tenido que soportar gastos por encima de 1,5 millones de euros, cuando los ingresos del Parlamento de Andalucía, "escasamente" financian el funcionamiento ordinario de la organización.
"No podemos seguir refugiados en nuestras asambleas esperando un milagro que no se va a producir, necesitamos confiar de una vez por todas en los demás y lo primero que tenemos que poner en marcha son unas finanzas fuertes", se precisa en el documento.
Entre los que han dado los mil euros está Valderas, el eurodiputado Willy Meyer, el diputado andaluz Pedro Vaquero y Antonio Rodrigo Torrijos.
