El nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha agradecido hoy a la jefa del Gobierno andaluz, Susana Díaz, y a los presidentes de Asturias, Javier Fernández, y Canarias, José Miguel Pérez, el "contraste tan contundente" de las políticas desplegadas en sus territorios con las políticas del PP. "Gracias Susana, gracias Javier, gracias José Miguel por mantener ese contraste tan contundente en favor de la igualdad social y económica ante una derecha que está causando tanto dolor", ha remarcado Sánchez en su discurso, con el que se ha clausurado el congreso federal extraordinario del PSOE.
Esta ha sido la única referencia a Andalucía en su intervención, en la que Cataluña ha acaparado las alusiones territoriales, aunque también ha mencionado a la Comunidad Valenciana.
De forma indirecta, Sánchez sí se ha referido a algunas medidas medidas políticas impulsadas desde Andalucía y que ha prometido poner en marcha.
Además, en la misma línea de "compromiso" que adquirió Susana Díaz tras ser investida presidenta de la Junta de Andalucía, el nuevo líder del PSOE ha asegurado -con palabras casi "calcadas"- que no le va a "temblar el pulso" para "echar a un corrupto" del PSOE.
"Voy a ser beligerante", ha enfatizado Sánchez, que ha recalcado que va a hacer suya la propuesta debatida en la Conferencia Política del PSOE, que "muchos de vosotros propusistéis -ha dicho- a través de numerosas enmiendas" para "acabar" con el aforamiento total de los cargos públicos.
También propondrá la limitación de los mandatos de gobierno a dos legislaturas, la reforma de la financiación de los partidos -para que "no ocurra lo que está pasando con el PP y la trama Gürtel-, así como garantizar la "independencia" de las instituciones que son "garantes de la higiene democrática".
"No quiero que haya representantes en las principales instituciones políticas", ha subrayado Sánchez, que ha anunciado también que van a publicar trimestralmente las cuentas del partido, así como los bienes e intereses "de cada uno de los cargos públicos del PSOE".
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha instado hoy a los socialistas a trabajar para acabar con la España "indignada, hastiada y herida" que cree que existe en la actualidad debido a las políticas de un Gobierno de derechas.
En su intervención de clausura del Congreso extraordinario socialista que le ha aclamado como nuevo secretario general, Sánchez ha abogado por modernizar la izquierda para sacar a España de la encrucijada en que se encuentra y desterrar palabras que "indignan" a todos como pobreza, crisis e independentismo.
Ha defendido igualmente hacer frente a la desconfianza que hay en los políticos debido a que muchos se han obsesionado con el corto plazo olvidando poner "las luces largas".
"Necesitamos políticos que hablen claro y den la cara, no que hablen a través de una pantalla de plasma", ha recalcado en alusión al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
