"Si Ebro Puleva pone fin a la fabricación de azúcar en La Rinconada y con ella a cerca de 200 puestos de trabajo, no le daremos segunda oportunidad". Fueron las declaraciones del alcalde de La Rinconada, Javier Fernández (PSOE), ante la incertidumbre que acecha sobre la continuidad de la azucarera con la aplicación de la Organización Común del Mercado (OCM).
Durante todo el proceso, el posicionamiento y la estrategia institucional de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de La Rinconada han ido encaminadas a garantizar la siembra en la campaña, lo que a fecha de hoy no puede darse por cerrado puesto que los agricultores detectan "inquietud e incertidumbre" sobre la postura que plantea Ebro Puleva sobre su futuro.
"Parece que los incentivos económicos para el cierre por parte de Europa siguen estando por encima del trabajo y de los trabajadores para Ebro Puleva", manifestó el regidor.
La fábrica en torno a la que nació el barrio de San José está en una difícil situación de espera, pendiente de conocer cuál será el futuro que el anunciado plan de reindustrialización de la firma Ebro Puleva reserva para ella. Será el día 27 cuando las organizaciones agrarias, los sindicatos y las autoridades conozcan la decisión empresarial, pero las posibilidades de cierre vuelven a sobrevolar La Rinconada y Guadalcacín, en Jerez de la Frontera (Cádiz), ya que la tercera azucarera de Andalucía, la de Guadalete, es en principio la única que se salvará.
Por ello, el regidor lanzó un aviso: "No habrá salida a los suelos y no se reclasificará como residencial ni un metro cuadrado, como consta en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)".
