Menú
Local

“Sobrevivir a la tragedia del Alvia no deja indiferente, tenía que hacer algo”

Cristóbal González Rabadán, un sevillano de 51 años que viajaba en el tren a Santiago accidentado, ha constituido la Asociación de Perjudicados por el Accidente Ferroviario.

el 26 ago 2013 / 23:55 h.

TAGS:

En su última entrada en el muro de Facebook, con fecha de 24 de agosto –justo un mes después de la tragedia–, Cristóbal González Rabadán ha subido una foto en la que aparece él asistido por otra persona que le sostiene y le ayuda a cruzar las vías del tren mientras su rostro refleja aturdimiento. De fondo, uno de los vagones del Alvia accidentado apenas unos kilómetros antes de llegar a Santiago. Este sevillano de 51 años, que viajaba de improviso en el tren, ha constituido la Asociación de Perjudicados por el Accidente Ferroviario de Santiago. 15182395 –¿Por qué ha subido una foto suya del accidente en Facebook? –La he colgado no como morbo, sino porque quiero que cale en la conciencia de las personas lo que puede suponer un despiste, para que se vea lo que se ha sufrido y se saquen conclusiones de lo que puede pasar por la imprudencia. Ése es el sentido de la foto, no quiero herir la sensibilidad de nadie. –¿Cómo la consiguió? –El miércoles y jueves pasado estuve en Santiago y me encontré con una reportera que me reconoció como el ciclista que estaba sacando gente del tren. Se acordaba de mí, me dijo que tenía una foto mía y me la pasó. –Antes incluso de que se cumpliera un mes de la tragedia, volvió a subirse a un Alvia con destino Santiago... –Me considero fuerte, pero puedo ser fuerte físicamente. Lo hice porque quise coger el toro por los cuernos. Esa sensación en Chamartín al subir al tren fue un rebote impresionante para atrás. Tanto me afectó que la azafata me preguntó si estaba bien y cuando le conté lo que me había pasado, me llevó al vagón de cafetería y me dijo que me quedase allí un rato. Poco a poco fui haciéndome a la situación, pero me pasé todo el tiempo agarrado al asiento, con temblor en las piernas, y cuando tomaba la curva... Yo no soy psicólogo pero hay terapias que te hacen enfrentarte a la realidad y otras en las que no es necesario. Yo preferí hacerlo, pero no recrearme. –Ha pasado un mes... –Se sobrelleva con mucha tristeza ver cómo personas tan jóvenes han perdido sus vidas, los que tendrán que permanecer en sillas, en camas... Estuve hace unos días en los hospitales de Santiago donde quedan catorce personas. Anímica y emocionalmente estoy fastidiado porque me parece que no vamos a tener toda la colaboración que nos prometieron. –¿Por qué cree eso? –Cuando volvemos a nuestras casas se nos da el alta del hospital, pero no el alta total. Para unos comienza la rehabilitación, más pruebas, análisis... y me consta que algunos los desplazamientos se los tienen que costear, sufren las listas de espera de los médicos, Allianz no da la facilidad que prometió en un principio... Se está enfriando el tema, y lo que sigue siendo una gran tragedia está quedando en un accidente más. Ése es otro de los fines de la asociación, que no se olvide tan fácil. –¿Por qué da el paso de crear la asociación de perjudicados? –Nunca hubiera pensado que me iba a ver involucrado en una tragedia de tal magnitud. Desde el primer o segundo día que estaba hospitalizado veíamos la dimensión que estaba alcanzando por la cifra de fallecidos y sabíamos que otras tragedias ocurridas en España siempre acababan en la constitución de asociaciones o plataformas de afectados. Así lo planteamos los cuatro o cinco que estábamos hospitalizados en la misma planta. Lo comenté con más heridos y la idea fue madurando. Creía que era necesario montar la asociación de representación y defensa de los afectados desde dentro, que lo hiciéramos los propios perjudicados, de manera que al vernos conectemos y sepamos de lo que estamos hablando. No sé si me equivocaré, pero lo que temía era que se politizara. –¿Y de ponerse al frente? –Porque cuando vives desde dentro esa gran tragedia, se te crea interiormente la necesidad de dar ese paso. Esta situación es algo que no deja indiferente a ninguno de los que salimos de esos vagones. Y porque además dispongo de tiempo. La asociación había que constituirla. No sé si seré el apropiado o no, pero me vi obligado a hacerlo porque había que empezar a moverse ya. –¿Cuántos socios se han adherido ya a esta plataforma? –Mañana o pasado mañana la asociación estará ya inscrita oficialmente y legalmente en el registro. Por el momento somos 55. En una hora me han llamado ocho personas, algunos familiares de los fallecidos, otros a los que les han dado el alta y quieren ver la documentación... –¿Cuál será su funcionamiento? –Quiero transmitir que el fin es preservar los derechos y atender las necesidades de los afectados. No hay coste alguno. No hay cuota inicial ni final ni la habrá. Hemos acordado que preste los servicios el despacho de abogados González Martín y asociados, que sigue trabajando en el caso de Spanair y tiene una gran experiencia como en el caso del aceite de colza, del Yakolev, pero sobre todo en Spanair, donde han conseguido millones de euros para los afectados. Ellos asumen la defensa y representación y recibirán un 15% inamovible de la indemnización al final de todo el proceso, cuando ya se haya cobrado. –¿Qué le ha parecido la respuesta que ha dado Adif a la imputación del juez? –Personalmente estoy muy irritado. El juez pide que le facilite dos personas responsables de la seguridad en el tramo Orense Santiago y Adif le manda la plantilla del personal. Hay una falta de colaboración y ofensa a las víctimas y a todos los afectados.

  • 1