El director de la Banda Sinfónica Municipal de Sevilla, Francisco Javier Gutiérrez, no da rodeos para confirmar cuál cree que es la posición del conjunto que dirige: "Somos los terceros en grandeza", afirma poniéndose en relación con la Orquesta Sinfónica de Sevilla y la Orquesta Barroca. "A pesar de que muchos crean que la Banda sigue jugando en segunda división, estamos entre las agrupaciones más importantes del mundo", afirma rotundo.
Apasionado de las orquestas de instrumentos de vientos, -como prefiere referirse a su formación-, Francisco Javier Gutiérrez impartió una conferencia didáctica en el Salón de Actos de UGT. "Nos encanta participar en cualquier actividad que suponga una mayor difusión de nuestro trabajo", dice. Por eso ayer, en lugar de una charla al uso, el titular de la Banda hizo de maestro de ceremonias de un concierto en el que participaron músicos solistas del conjunto.
Desde un quinteto de jazz a un ensemble de percusiones pasando por una genuina big band de jazz de Nueva Orleans, Gutiérrez está enfrascado en contagiar una idea clave: "Tenemos un repertorio inmenso, todos los estilos se adaptan como un guante a nuestra formación, el problema es de quienes todavía nos siguen asociando únicamente con la música de Semana Santa", dice.
El responsable de la Banda, además de aspectos puramente musicales, también abordó otros más políticos como guiño a la central sindical que ayer les invitó:"Mucha gente no sabe que las bandas de música jugaron un papel clave en la posguerra franquista, muchas fueron las personas que vieron en ellas una salida profesional y que hoy continúan ligadas a la música", explicó. Uno de los pueblos que más puede contar en primera persona esta historia es Guillena.
