El presidente del PP-A, Javier Arenas, calificó ayer de "solemne barbaridad" la posibilidad planteada por el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, de aplicar subidas de impuestos "si es necesario" dentro de su paquete de medidas de ahorro. "Y con la que está cayendo", censuró. El líder de los conservadores en Andalucía insistió en que toca hacer "justo lo contrario" para reflotar la comunidad, porque "a más impuestos, más males", e incluso enarboló una bandera más propia de la izquierda al anunciar que, si gana y se convierte en presidente de la Junta, "ya no se va a castigar a los pensionistas, a los funcionarios y a los consumidores con la subida del IVA". "Si ganamos, una de las primeras medidas que tomaré será la de suprimir el impuesto de donaciones y sucesiones, que ya no tienen que pagar 18 millones de españoles mientras que los andaluces sí", dijo en un acto en Sevilla.
Griñán dijo que no descarta "absolutamente nada" pero matizó que cualquier revisión fiscal que se acometa "debe gravar a las rentas más altas". Su apuesta recibió ayer el aplauso de la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, quien dijo que es una "suerte" para "la mayoría de la gente" que "esté gobernando el PSOE en Andalucía y en España", por su actitud "responsable" ante la crisis.
Desde IU, su coordinador regional, Diego Valderas, también atacó las medidas de ajuste de los Gobiernos andaluz y nacional, acusándolos de "resignarse" a no recuperar el empleo hasta 2015. A su juicio, los tijeretazos muestran "la renuncia a la justicia social; la victoria del mercado sobre los estados y la soberanía de los pueblos; la criminalización y el desprestigio de los empleados del sector público; y el retorno a la Europa de dos velocidades". "En lugar de poner en valor la lucha contra el fraude fiscal, eliminar los paraísos fiscales o recortar los escandalosos salarios y los grandes beneficios bancarios, los cuestiona, aplaza y plantea como temporales", dice. En esa línea la coalición de izquierdas ha presentado una iniciativa en el Parlamento en la que pide a la Junta que no conceda subvenciones o avales a empresas con directivos que ganen más que Griñán (81.155,04 euros). El PP también pedirá en la Cámara autonómica que la Junta "no reduzca ni ralentice" la inversión pública prevista para 2010.
