Es el símbolo de las nuevas infraestructuras de movilidad en el área metropolitana: un ascensor con capacidad para 25 personas en cada viaje que servirá para conectar el entorno del Monumento, en San Juan de Aznalfarache, con el intercambiador de transportes del Barrio Bajo. De este modo, el antiguo Camino de Sevilla, que servía para conectar el Aljarafe con la capital hispalense a través de la vaguada que dividía los dos cerros que hoy conforman el Monumento, volverá a cumplir su misión pero adaptado a los nuevos tiempos.
Fabricado por Thyssen Krupp Elevadores, es el primero de este tipo que se instala en Sevilla. El ascensor está ya colocado en su plataforma y sólo a la espera de que se completen los templetes de entrada y salida del mismo, así como el sistema que permitirá que esté gestionado desde el puesto de control central del Metro de Sevilla , dado que desembocará en su línea 1. La Junta de Andalucía, que paga esta infraestructura en el marco de los trabajos unidos a la puesta en marcha de la primera línea del suburbano, tiene previsto que comience a funcionar el primer trimestre de 2011.
El elevador se inclina sobre la ladera apoyado en una docena de pilares de 25 metros de longitud para salvar la pendiente. El trayecto tendrá una duración de un minuto aproximadamente y está previsto que sea totalmente gratuito. El ascensor enlazará la cima del cerro con los aledaños del intercambiador de transportes del Barrio Bajo, donde confluyen el trazado del suburbano y las líneas de los autobuses del Consorcio de Transportes del área metropolitana de Sevilla .
Es un aparato inclinado y con sistema de tracción eléctrica con contrapesos con cables de acero galvanizado. La cabina tiene un acabado de acero inoxidable satinado y luna de cristal de seguridad. Dispone, entre otras cosas, de telefonía bidireccional, sistemas de emergencia e indicador de posición visual y acústica para personas con discapacidad. El frontal de la cabina está dotado además de iluminación integrada en la decoración.
Objetivos. Se convertirá así en una nueva forma de comunicar a los vecinos del Monumento con el suburbano pero al mismo tiempo el proyecto persigue la puesta en valor del paisaje del propio cerro y de las vistas de la capital hispalense que ofrece.
En este sentido, el ascensor es el hito de un conjunto de obras para la reurbanización del Monumento, donde se incluye la construcción de un centro de interpretación de los restos arqueológicos encontrados precisamente en el marco de los trabajos de la línea 1. Todo ronda una inversión de tres millones de euros que permitirán cambiar totalmente la cara de esta parte de San Juan de Aznalfarache.
En el caso del centro de interpretación de restos arqueológicos ubicados en la plaza Doctor Muñoz Cariñanos presenta un nivel de ejecución del 50%, y dispone ya de todo el cerramiento perimetral y de las vigas que soportarán su cubierta, según informó la agencia Europa Press. Bajo el cerro se encuentra la antigua ciudad romana de Osset, así como vestigios de otras épocas, sobre todo del castillo de los monarcas almohades. Todo ello será puesto en valor para difundir su conocimiento.
