Cuando los actores afirman que su profesión es una de las más duras que existe, tienen toda la razón del mundo. Nos cuesta trabajo imaginar lo mal que lo están pasando Imanol Arias y su compañero de viajes, Juan Echanove, durante el rodaje de la serie documental Un país para comérselo, una producción que se emite en la 1 de TVE la noche de los jueves. En sus rutas, los veteranos actores viajan por las ciudades más encantadoras de nuestro país, descubriendo el encanto natural de sus gentes, plazas, barrios, caminos, campos, paisajes y la gastronomía, que no podía faltar en la lista.
Imanol Arias y Juan Echanove presentaron ayer, junto al presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, el capítulo del documental dedicado a nuestra provincia. Sevilla es el nuevo destino a visitar por estos singulares viajeros porque están "muy vinculados personal y profesionalmente a esta tierra. Es un destino ideal, aunque la provincia desaparece en beneficio de la gran ciudad, y nosotros hemos querido poner en valor los pueblos". Y es que el recorrido de los caminantes se centra en los rincones más exquisitos de los alrededores de la urbe, marcando una ruta turística nada desdeñable para los amantes del campo. Los actores han recorrido los pueblos más notorios de la Sierra Norte, la campiña o el Aljarafe, con enclaves como "Carmona, Tomares, Arahal, Constantina, Cazalla y Estepa por nombrar algunos. Todos encantadores, de todos se aprende", destacó Echanove.
El capítulo dedicado a nuestra tierra, llamado Dos de sonrisas y una de lágrimas, pretende "buscar un nuevo sentido de entender la vida, con sonrisas y lágrimas a la vez. Hemos encontrado ciudadanos menos ilustres pero con un corazón más grande que la Giralda", recalcó Echanove. El capítulo quiere desterrar la imagen provinciana de la antigua Sevilla en blanco y negro, para mostrar una visión muy renovada de una ciudad "que afronta el siglo XXI de cara al XXII", comentó en este sentido Echanove.
La serie documental, que se ha posicionado en la pequeña pantalla con más de dos millones y medio de telespectadores, pretende superar esa cifra con el capítulo sevillano. "Sin duda así será gracias al trabajo de estos dos grandes profesionales", comentó un Villalobos agradecido y que ha nombrado a los viajeros embajadores oficiales de la provincia. Pero no desesperen, porque aún faltan meses para que podamos ver por televisión las vivencias de estos dos veteranos del cine. "A partir de septiembre, cuando recoloquemos los capítulos, igual que los costaleros se colocan bajo el paso de Semana Santa ¡que ya tenéis encima!". Y es que, como bien apuntó el actor al terminar su discurso, "somos para comernos".
