Un preso que acudió ayer a una revisión de Traumatología tras una reciente intervención quirúrgica por la que usaba una muleta se fugó del hospital de Torremolinos (Málaga) mientras era custodiado por la Guardia Civil, según confirmaron fuentes penitenciarias. Se trata de un hombre de 45 años que responde a las siglas M.D., y que se encontraba en prisión preventiva desde el pasado 9 de septiembre en la cárcel provincial de Alhaurín de la Torre condenado por delitos de hurto y estafa.
El recluso ha estado ingresado en otros centros penitenciarios de España, aunque no se le considera "especialmente peligroso" y tampoco se le atribuye ninguna fuga anterior. La semana pasada se tuvo que someter a una operación en una pierna, lo cual le había producido una cojera temporal. Ayer había sido citado para una revisión en el hospital y aprovechó esa circunstancia para escaparse.
Según fuentes sanitarias del centro hospitalario, los hechos ocurrieron poco después de la llegada del interno al Hospital Marítimo de Torremolinos, de donde huyó a la carrera y tuvo que saltar el muro perimetral del centro sanitario. Los agentes de la Guardia Civil que custodiaban al preso le persiguieron, pero les resultó imposible localizarlo, según fuentes del instituto armado. Estaba previsto que el reo se presentara mañana en los juzgados de Málaga para asistir a su juicio. La Policía continúa buscándole sin que por ahora se tengan pistas de su paradero.
Esta fuga recuerda mucho a la que ocurrió hace tan sólo dos semanas en Huelva. Un interno de 26 años que cumplía una condena de tres años y ocho meses por robo con violencia también se dio a la fuga en una de las salidas vigiladas de la cárcel onubense. En este caso se trataba de una visita guiada que hicieron diez reclusos custodiados a la Facultad de Derecho, con el objetivo de que los internos del centro penitenciario, así como los funcionarios y educadores que los acompañaban, conocieran la actividad que diariamente se realiza en la Universidad. El hombre echó a correr y nadie pudo detenerle. Dos días después regresó voluntariamente a la cárcel.
