Economía

Un te quiero pero sin flores

La flor cortada andaluza agudiza su crisis al caer el consumo y la exportación

el 10 oct 2010 / 20:01 h.

Imagen de la sala de ventas de flores y plantas ornamentales de la empresa Rivera en Chipiona.

El hasta hace una década boyante sector de la flor cortada y las plantas ornamentales atraviesa en la actualidad un severo ajuste ante el descenso del consumo español, a su vez desencadenado por la crisis económica, y la hegemonía internacional que ejerce en los mercados Holanda.

Así, los datos para Andalucía elaborados por la Consejería de Agricultura hablan de una fuerte caída de la superficie y la producción y, por lógica, del valor de la cosecha, mientras que las organizaciones agrarias agregan otros dos problemas, el de los bajos precios y el incremento de las incineraciones frente a los entierros tradicionales.

464 han sido las hectáreas dedicadas a flor cortada este año en la comunidad andaluza, de ellas 245 en Cádiz -siendo Chipiona su centro neurálgico- y unas 100 en Sevilla -sobre todo en la comarca de Los Palacios-, las dos principales provincias productoras. El descenso ha sido del 6% desde la última campaña y de un 28% respecto a la media registrada en el trienio 2005-08.

Más acelerada ha sido la caída de la producción, si bien hay que tener en cuenta los temporales de lluvias del invierno pasado, pues se cebaron con los invernaderos y dañaron la cosecha. Ésta ha sido en esta campaña de 673 millones de unidades, un 20% interanual menos y el 35% al compararse con el promedio de los tres ejercicios precedentes.

En cambio, las tierras dedicadas a plantas ornamentales han crecido un 4% en un año y un 16% en tres, hasta 633 hectáreas -Almería es en este caso la principal provincia, con 190, seguida de la malagueña, 154, y Sevilla, 80-, si bien la producción, con unos 44 millones de unidades, se ha visto recortada un 13% en un año y el 19% en tres.

El valor de la cosecha conjunta de la pasada campaña fue de 68,3 millones de euros. Lejos quedan los 239,45 millones alcanzados en 2005.

Un informe hecho por la Consejería reconoce que el sector andaluz ha perdido cuota tanto en España como en los mercados internacionales, y aduce cinco principales causas: la reducida gama de la oferta, con una excesiva dependencia del clavel, la escasa calidad de la producción, la falta de unión entre comercializadores y productores, la ausencia de una estrategia comercial y, por último, la deficiente tecnificación para la fase post-cosecha.

Fue un error, dice el informe, que los productores andaluces decidieran abandonar las subastas de Holanda -es el mercado de referencia- y optar por la venta directa en 1996, porque no estaban preparados y, al final, han salido perdiendo.

De esta forma, la exportación ha descendido el 69% tanto en volumen como en valor entre 2002 y 2008, pasando de 78,2 millones de euros a 23,9 millones. En cambio, las importaciones se han incrementado, de 45,3 a los 69,5 millones de euros.

"El problema de rentabilidad se agudiza ante una coyuntura de altos costes de producción (con incremento del precio del gas, gasóleo y otros insumos) y el hecho de que el sector de flores y plantas obtiene todas sus rentas del mercado sin recibir ningún tipo de ayuda de Bruselas", indican en la organización agraria COAG de Andalucía, que habla también de la competencia "desleal" de Marruecos, Colombia o Israel.

El consumo per cápita ha bajado de los 28 euros. En 2003 superaba los 74. El te quiero se dice sin flores.

El clavel. El 85% de la producción regional de flor es clavel, el 3% es de crisantemos, el 1% corresponde a las rosas y otro tanto a orquídeas y gladiolos. No han variado desde 2002.

La rosa. Andalucía importa sobre todo rosas, con el 42% del total de las compras al exterior, pero, ante la baja calidad de su producción, también clavel, con el 21%.

El precio. La docena de rosas ha pasado de 4,36 euros en 2003 a 3,77 euros del pasado año y la de clavel valía 1,08 euros en 2009 frente a los 1,28 de la anterior campaña.

Las empresas. Andalucía tenía 25 comercializadoras de flor en 2009, frente a las 61 de 2003. La mayoría, 17, son pequeñas empresas y hay 6 cooperativas y 2 grandes compañías

  • 1