Unai Emery, durante el entrenamiento del viernes en la ciudad deportiva. Foto: Manuel Gómez.
El Sevilla se ha empeñado en ser protagonista de la Liga 2014-15. Tras nueve jornadas disputadas, suma 22 de los 27 puntos posibles y es, por méritos propios, una de las grandes sensaciones del momento. El equipo de Unai lidera la clasificación con los mismos puntos que el Barcelona, de ahí que sean muchas las personas que hagan estas preguntas: ¿Dónde está el límite de este Sevilla?, ¿es candidato al mismísimo título de Liga? Para Emery, la respuesta está muy clara: no.
La normalidad la marcarán dos equipos que tienen a los mejores jugadores del mundo y que pierden muy pocos partidos. Estar a ese nivel es difícil. ¿Que a día de hoy lo estamos? Sí, pero también tenemos que jugar contra ellos. Y, primero, en Bilbao. Y ser capaces de mantenernos una jornada más ahí arriba. Si ganamos, continuaremos siendo colíderes como mínimo. Pero seguimos pensando en el momento, por muchos comentarios que haya. Puede haber elogios que igual no son verdaderos, al igual que críticas. Pensar que somos aspirantes a ganar la Liga es una utopía que está muy lejos de la realidad, de momento. De momento, sostiene.
Independientemente de ese enigmático de momento, que repite hasta en tres ocasiones, Emery insiste en que ganar la Liga no es factible hoy por hoy. ¿Ves? ¡Si es que te he pillado! ¡Te he pillado! El supuesto de ser campeón de Liga
¿Pero qué supuesto? ¡No hay supuesto! Consultemos ahora mismo a una casa de apuestas, que ésas no juegan con supuestos, juegan para ganar. Traedme ahora mismo aquí las posibilidades y las cuotas que se pagan para los posibles campeones de Liga. Tampoco les voy a hacer caso, pero traédmelas, decía el técnico con buen humor viendo que le iban a cuestionar otra vez por la candidatura al título.
El año pasado, hasta el último partido el favorito seguía siendo el Barcelona. Y estamos en la jornada décima, así que fíjate. ¿Qué ganamos con ilusionarnos con algo que queda lejos y que incluso puede provocarnos luego una desilusión si no lo conseguimos? Por eso, insisto en vivir el momento, afirma Emery.
Proyección de puntos
El Sevilla, tras sumar 22 de los 27 puntos posibles en las nueve primeras jornadas, presenta una proyección estratosférica. A este ritmo, terminaría la Liga con 92,88.
En cuanto al partido de San Mamés, el entrenador del Sevilla espera al mejor Athletic de la temporada, en un duelo en el que habrá que ofrecer la mejor versión para salir airoso de este estadio. Allí se pondrá a prueba el gran estado del forma del equipo, al que Unai a la vista está intenta aislar de todos los elogios que se generan a su alrededor, incluidos los que le apuntan como posible aspirante al título, algo que, a juicio de Emery, no supone saltar al terreno de juego con una mayor responsabilidad. Es la misma siendo últimos que líderes. El momento es diferente porque la afición está disfrutando con el equipo y queremos alargar eso al máximo, explica.
Todo un desafío El técnico quiere enfocar toda la atención en el partido de San Mamés, escenario donde la pasada campaña se difuminaron las opciones de clasificación para la Champions. Actualmente, el estado de forma del Sevilla y del Athletic son muy distintos, aunque Emery recela.
En aquella ocasión jugamos con otro objetivo la final de la Europa League también ahí y dentro de una temporada que se estaba haciendo larga. Ahora, el momento es diferente, hay muchos cambios de jugadores en los dos equipos
De todos modos, ese Athletic que nos ganó 3-1 será el mismo al que nos enfrentemos ahora, el mismo que ganó al Nápoles. La dificultad será grande dentro de un gran ambiente en San Mamés. La única forma de ganar allí es teniendo una preparación exquisita. El desafío es del más alto nivel, indica.
Por otra parte, el técnico se declara satisfecho con el balance de las rotaciones que está realizando hasta la fecha. No es excusa jugar jueves y domingo. Van encaminadas a que el rendimiento del equipo tenga un alto nivel de respuesta. Creemos en esta modalidad de plantilla preparada para afrontar tres competiciones. Hubo gente que descansó el otro día porque lo necesitaba y gente que se enganchó o, mejor dicho, que ha tenido su ocasión, aunque estoy igual de satisfecho tanto con ir a Lieja y empatar un partido difícil como de ganar en Sabadell, dice para finalizar.
