Emery, en un entrenamiento (Kiko Hurtado/Marcamedia)
Uno de los grandes objetivos de Unai Emery desde su llegada al banquilo del Sevilla ha sido dotar al equipo del armazón defensivo necesario para poder hacer bueno el fútbol de ataque que predica el técnico de Hondarribia. Sin embargo, los planes, y muy especialmente esta temporada, la primera que Unai comienza al frente del plantel, han caído en saco roto por el momento. La muestra más clara de ellos es que el Sevilla es el segundo conjunto más goleado del Campeonato Nacional de Liga: nada menos que 26 tantos (dos de media por encuentro, cifra altísima) y sólo en una ocasión logró mantener su portería a cero.
Este último dato podría ser un aviso de lo que puede ocurrir el próximo domingo frente al Betis en el Sánchez-Pizjuán. Y más aún si recordamos que los cinco últimos derbis han visto cómo ambos conjuntos marcaban al menos un gol. Retrocediento en el tiempo, 3-3 en la última visita a Heliópolis; 5-1 en el último choque en Nervión; 1-2 para los verdiblancos en suelo sevillista en la jornada 20ª de la campaña 2011/12; 1-1 en la primera de ese curso; y 1-2 para los béticos en la 22ª de la temporada 2008/09. Hasta ésta última, el Sevilla, en plena era Juande, llegó a firmar seis encuentros consecutivos dos de ellos de Copa sin encajar un solo gol frente al eterno rival.
Ahora, las cosas son diferentes. La diferencia entre los dos conjuntos se ha reducido mucho y las características de ambos han propiciado que los aficionados hayan visto bastantes goles en los enfrentamientos más recientes: hasta doce la pasada campaña en el doble duelo liguero.
En lo que respecta al presente campeonato, el Sevilla sólo ha conseguido mantener su portería a cero en una ocasión. Fue en el Ciutat de Valencia, en la segunda jornada. Allí, los nervionenses firmaron un empate a cero con el Levante de Joaquín Caparrós. En la primera, el equipo de Emery recibió tres goles en el Sánchez-Pizjuán a manos del Atlético.
Tras el paréntesis vivido en el feudo del Levante, el conjunto nervionense acumula ya once jornadas consecutivas encajando al menos un gol por partido. A saber: recibió dos como local ante el Málaga, tres en el Camp Nou frente al Barcelona, tres en Mestalla ante el Valencia, uno en casa frente al Rayo, uno en San Sebastián jugando contra la Real, uno en Nervión frente a la UD Almería, dos en Zorrilla ante el Valladolid, uno en casa contra Osasuna, siete en el Santiago Bernabéu a manos del Real Madrid, uno en casa frente al Celta y otro ante el Espanyol en Cornellá-El Prat.
En definitiva: un hándicap en contra que obliga a realizar prácticamente proezas para poder ganar un partido.
TRAS EL MADRID. En Liga, el Sevilla es el equipo que menos veces logra mantener su portería a cero, justo por detrás del... Real Madrid. El conjunto de Carlo Ancelotti es, junto a UD Almería, Elche y Osasuna, el segundo que menos veces lo ha conseguido: tan sólo dos. La diferencia es que ofensivamente el Madrid es una máquina de hacer goles y suple sus carencias defensivas con su enorme arsenal ofensivo. Barcelona (siete partidos), Levante (seis), Atlético (cinco) y Real Sociedad) son los equipos que más veces lograron despedir un encuentro sin recibir gol.
¿Será capaz el Sevilla de hacerse fuerte este domingo ante el Betis? No encajar goles se ha convertido en un reto para Unai que por ahora no logra.
