Womex, el más importante mercado de músicas del mundo, que ha venido celebrándose en los últimos años en Sevilla, dejará definitivamente la ciudad ante la presión de otras capitales europeas por quedarse con esta cita. La feria había acordado el año pasado con el Ayuntamiento que se establecería en la ciudad hasta 2011.
Aunque el pasado año el director de The World Music Expo, Gerald Seligman, manifestó públicamente su deseo de que la capital hispalense pudiera convertirse en la sede de esta importante cita comercial los próximos tres años, tal y como había demandado el propio Consistorio, en estos último meses ha cambiado de opinión.
El motivo que esgrimió el miércoles a este periódico es "el gran interés de otras urbes europeas", que le ha hecho decidir que este festival, que desde 2007 se celebra vinculado a la Feria Mundial del Flamenco y cuya edición de 2008 arrancará en octubre, vuelva a itinerar, como hizo en sus primeros años.
Womex nació en Berlín en 1994 y desde entonces ha pasado por múltiples ciudades europeas como Marsella, Bruselas, Estocolmo, Rotterdam, Essen, Newcastle. En 2003 se celebró en Sevilla y, tres años después, en 2006, el entonces delegado municipal de Cultura, Juan Carlos Marset, negoció con los organizadores que esta cita permaneciera en Fibes durante tres ediciones.
El Ayuntamiento ofreció a Womex antes de comenzar la edición de 2007 volver a cerrar otro trienio, hasta 2011, en Sevilla, algo que sintonizaba con la intención de la feria de instalarse por largos periodos en una sede estable, ante el gran tamaño que estaba cobrando la cita comercial y el elevado coste que suponía llevarla cada año a una ciudad diferente. No obstante, el Womex de este año será, de momento, el último que se celebre en Fibes.
Según expuso Seligman a este periódico, tras haber recibido Womex en los últimos meses propuestas de 15 ciudades de toda Europa para acoger este importante mercado, ha decidido volver a itinerar por el Viejo Continente: "Nos hemos dado cuenta de que aún es demasiado pronto para asentarnos definitivamente por un largo periodo".
Aunque resulta llamativo que de un año para otro el director de Womex haya cambiado de opinión con respecto a la idoneidad de Sevilla, Seligman se encarga de disipar cualquier sombra de duda, no ahorrándose elogios para el Ayuntamiento: "Hay pocos lugares en el mundo con tan buena música, con unas tradiciones tan bellas y un gobierno tan progresista, decidido a apoyar la cultura". Es más, anuncia que está estudiando nuevos proyectos con la ciudad y no espera poder regresar alguna vez con el Womex.
Por su parte, la delegada municipal de Cultura, Maribel Montaño no valoró como algo negativo la marcha de Womex e incluso negó que la fata de presupuesto o de sintonía con la organización estén detrás de la marcha de este evento. Pese a esto, y tras garantizar que el Consistorio podría asumir el coste de esta cita anualmente, sí reconoció que los 400.000 euros al año que cuesta cada año el Womex a las arcas municipales es una "cantidad muy considerable que ningún ayuntamiento podría asumir eternamente", sobre todo teniendo en cuenta que el presupuesto anual del ICAS es de cinco millones.
En cualquier caso, avanzó que con ese dinero se organizarán nuevas actividades, descongestionando el periodo otoñal, ya cargado culturalmente y, tras recordar que "la naturaleza del Womex es transitar", no descartó que esta feria pueda volver a la ciudad.
