La situación política y económica del país marcó ayer el primer despacho veraniego entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el Rey. El jefe del Ejecutivo trasmitió a don Juan Carlos dos ideas esenciales: ya se dan las bases para consolidar la recuperación económica en España y que, por ahora, no se plantea una crisis de Gobierno.
Tras despachar con el Rey en el Palacio de Marivent, Zapatero aseguró a los periodistas que, a corto plazo, no hará cambio alguno en el Ejecutivo después de que la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, haya decidido concurrir a primarias para encabezar la lista de su partido a los comicios autonómicos de Madrid y que el secretario general del PSOE-A y presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, quiera que el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, sea candidato en Córdoba.
Así, Zapatero insistió en que no hay ninguna previsión sobre el cambio en el Gobierno, "no a corto plazo, independientemente de lo que suceda en su momento -y es a largo plazo- con una posible candidatura a la Comunidad de Madrid de Jiménez".
Acerca del proceso de primarias en el que Trinidad Jiménez se enfrentará al secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, el presidente aseguró que será una contienda "constructiva". Para el líder de los socialistas, las primarias son una "gran oportunidad" para el debate sobre los temas que interesan a los ciudadanos, como la sanidad, la educación o las políticas sociales.
Otro de los temas que centraron las conversaciones entre el Rey y el jefe del Ejecutivo en el Palacio de Marivent, donde ambos se reunieron ayer durante una hora, fueron las perspectivas de la situación económica y laboral y los efectos de las medidas promovidas por el Gobierno a partir de mayo. En una comparecencia informativa al término del encuentro, Rodríguez Zapatero subrayó que la principal preocupación de don Juan Carlos es consolidar la salida de la crisis, la estabilidad financiera y la recuperación económica en España "para que cuanto antes se pueda volver a crear empleo".
El presidente del Gobierno transmitió al Rey que "en las últimas semanas se ha producido un proceso de estabilidad, consolidación y mayor sosiego en torno a la economía española" e insistió en que a ello ha contribuido el conjunto de medidas puestas en marcha por su Gabinete (más información en la página 32).
Zapatero también hizo referencia al informe emitido en marzo por el Departamento de Estado de EEUU sobre derechos humanos en el que recoge una relación de quejas puntuales sobre medidas lingüísticas adoptadas por algunos Gobiernos autonómicos, como el País Vasco, Cataluña y Baleares. El presidente anunció que enviará otro informe a EEUU sobre la "convivencia lingüística" en España para demostrar que funciona "razonablemente bien", ya que no está de acuerdo con que se diga que se lesionan derechos en algunas comunidades. Precisó que siempre ha tenido la percepción de que esa convivencia lingüística "para la inmensa mayoría de españoles funciona bien".
