Siempre pensé que el ministro de Cultura era un hombre prudente y preciso. Las declaraciones amenazando con el IVA, su subida de nuevo, es justamente todo lo contrario: imprudencia.
Habla de un tema: la bajada del IVA por las salas de cine sin precisar las circunstancias y generalizar su afirmación es, como poco, una osadía impropia de quien es persona letrada y amante de la literatura.
Y dado que el tema parece persistente algunos datos: los exhibidores independientes, aquellos que no son propiedad de una multinacional, tuvieron que cerrar decenas de salas, solo en Andalucía más de 60, por la crisis y el salvaje IVA que impuso el ministro Montoro.
Las entradas de cine tienen una diferencia de precios entre cines de Madrid o Barcelona y el resto del país. En Andalucía estamos un 20 por ciento por debajo del precio de estas ciudades e incluso existe, en muchas salas, un precio especial para desempleados, jóvenes, tercera edad, etc.
Sacar a pasear el tema del IVA y atizar la idea que la bajada debe trasladarse a precio de las entradas es una idea poco coherente con una actitud que tiene bastante de populista y poco de responsable. Más cuando España es de los pocos países de Europa que no tiene un sistema de apoyo a los cines independientes que les permita competir con los grandes grupos multinacionales.
Quizás es momento de recordar a Mateo Alemán: «La contraria fortuna hace a los hombres prudentes».