La gran caravana de la Pasión

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17 feb 2018 / 20:01 h - Actualizado: 17 feb 2018 / 20:01 h.
"La trastienda hispalense"

Por la orilla del río la primavera se acerca... ¿Por cuál de las dos orillas? ¿Por la de Santa Ana o por la de San Telmo? ¿Por la del Betis o por la del Arenal? Da igual, escuchad como se aproxima la gran caravana de la pasión al trote de naranjos alazanes montados por cruzados azahares de la mejor yeguada de fragancia de la tierra. Legiones caminando al son de trombas de baquetas redoblando sobre pellejos curtidos de fanfarrias de compases de Sol y de Tres Caídas, de Cigarreras y Esencia de veteranos soldados de la música callejera sevillana, Virgen de los Reyes de padrenuestros cofrades, Encarnación de sones de Calzada para Costaleros de Dios, y centurias romanas de la Huerta del Macario derrochando compostura, con San Luis, San Gil y San Marcos, entre la Sentencia de Cristo y la Esperanza del Mundo.

La Bella Señora que preside la gran Basílica Mariana de la fe de Sevilla. La que al mirarte, tus ojos te llenan de sosiego... Y de vida.

Mirad a la lejanía y veréis como caminan hacia la ciudad, entre antorchas de hachones y luces temblorosas de candelerías, batallones de estandartes y simpecados, varas, cirios, guiones y banderas, ondeando las emociones que el pueblo vive a la espera de Nuestro Señor... Bendita rampa del Divino Salvador, donde los niños de Sevilla dan horma a sus zapatos nuevos correteando por la entrada de Dios Hijo en la Jerusalén hispalense.

Las Cruces de Guía esperan quedas en las traseras de los portones de San Julián y San Esteban, de San Gonzalo y San Bernardo, de San Antonio y San Lorenzo... Cabalgata pasional de primavera... Esparto y penitencia, oración y promesa, devoción y amor... San Fernando siempre preside, la Virgen de los Reyes bendice... San Isidoro y San Leandro cantan salmos de campanas al vuelo de una tierra nazarena por excelencia, escoltada por martillos capataces y chicotás dignas de ser pintadas por los arcángeles Murillos de la gloria y escritas en la Biblias sevillanas por Quinteros utreranos y Machados evangelistas de las Doncellas y de la Cruz Verde, del Cerro y del Tiro de Línea, de la Trinidad y Santa Catalina, de Pureza y San Jacinto.

El Ángel de la Fama sueña con clarinear al cielo azul de Sevilla la llegada de la gran comitiva procesional, con sinfonías de Font, escritas con almíbares de garrapiñadas y dulce miel de las colmenas de torrijas de nuestras matriarcas.

Sevilla no pierde comba en sus tradiciones, por eso es el mejor paraíso para el trono de María Santísima. ¡Dios te Salve, Sevilla!