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Los jugadores béticos, antes del partido con el Valladolid. / Manuel Gómez
Osasuna y Barcelona B, los dos próximos rivales del Betis, son, con diferencia, los peores equipos de la Liga Adelante de los dos últimos meses de competición. Los rivales más peligrosos, por tanto, que se pueden cruzar en el camino los de Pepe Mel, que últimamente se han especializado en arrebatar puntos a los poderosos de la categoría y repartirlos entre los más necesitados.
Los navarros llegarán el Domingo de Resurrección -esperemos que no lo sea para ellos- con una necesidad extrema, tras sumar solo 2 puntos de 27 en las nueve últimas jornadas y en peligro serio de desaparición por desfalcos y amaños varios, en los que varios jugadores béticos, incluso, están presuntamente implicados.
Luego los béticos visitan en la Ciudad Condal al Barça B, otro equipo en crisis tras sumar solo 3 puntos de 24. Y lo harán arropados por la fiel infantería bética de la novena provincia andaluza, Catalunya, que solo ha visto ganar a su equipo esta temporada, en Sabadell, Girona y Palamós, ante la Llagostera.
La ocasión la pintan calva, pues mientras el Betis mide fuerzas ante dos de los dos peores equipos de la Liga, sus rivales directos han de despedazarse entre sí. La próxima jornada hay un Girona-Valladolid (Las Palmas visita al Albacete, que lleva siete sin perder) y a la siguiente un Las Palmas-Girona y un Zaragoza-Sporting. Si los verdiblancos hacen lo que es debido, que es ganar estos seis puntos en litigio y luego tres en casa ante la Llagostera, pueden salir con medio ascenso en el bolsillo, justo cuando arranque la Feria de Abril.