Las curvas llegan ahora

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12 oct 2015 / 10:36 h - Actualizado: 12 oct 2015 / 10:43 h.
"Deportes","What else?"

Que la temporada no sería fácil era algo esperado. Primero, porque es difícil mantener el nivel de la pasada campaña, sobre todo cuando se marchan algunos de tus mejores futbolistas (Bacca, Aleix Vidal) y llegan hasta diez caras nuevas. Segundo, porque disputar la Liga de Campeones no sólo distrae sino que, además, desgasta debido a la enorme exigencia que trae consigo, especialmente si te toca un grupo como el que le tocó al Sevilla. Y tercero: la paciencia no es amiga del fútbol. Lo inesperado, en cambio, es haber visto al equipo de Unai Emery dar tantos vaivenes. Demasiados, aunque sus dos últimas victorias en el campeonato deben darle esa tranquilidad que necesita para reencontrarse. Todo ello con permiso de la Champions, el gran reto tanto del técnico como de sus jugadores. Caer eliminado en la fase de grupos supondría una decepción pese a no ser favoritos, aunque lo que realmente decepcionaría es caer sin ver ese sello que llevó al Sevilla tan lejos. Es, por tanto, el momento de dar un paso al frente, el momento de que aquellos jugadores llamados a liderar al equipo aparezcan para no marcharse. Además, deben hacerlo desde ya, porque el calendario de aquí a final de año es duro y está en juego media temporada. Vienen curvas. Y peligrosas.

Peligrosas porque en el Sevilla no sólo se divisan esas curvas deportivas. También las institucionales. Los movimientos se suceden y la lucha por el poder subyace tras esos vaivenes que da el equipo y acapara todos los focos. Las curvas, las de verdad, llegarán en este final de 2015. Justo cuando el equipo esté jugándose gran parte de sus aspiraciones, tanto en la Liga como en la Champions. Por ello, hay que prepararse, centrarse y no detenerse. Emery necesita jugadores con esa mentalidad que reclama para poder competir al máximo nivel, pero también con una mentalidad que les permita navegar en aguas revueltas. La temporada 2015/16 tiene un enorme valor. Asentarse en la élite del fútbol europeo es clave para el futuro del club. Un club que debe mostrar la madurez que se espera en los momentos difíciles. Sólo así podrá crecer y seguir siendo de Champions.