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Pasajeros del aeropuerto de San Pablo esperando para embarcar. / Javier Díaz
Malos salarios y faltas de personal. La historia que se ha vivido en Barcelona con los trabajadores de la empresa de seguridad –Eulen– encargada de los controles en el aeropuerto del Prats (Barcelona) se repetirá en Sevilla «si Prosegur SIS no buscan una solución a las demandas de sus empleados».
El próximo 24 de agosto se celebrará una reunión entre los sindicatos que tienen representación en el aeropuerto de San Pablo (CCOO, UGT, CSI-F y STS-A). En esta cita se debatirá las concentraciones y los paros que se llevarán a cabo por parte de los trabajadores de Prosegur SIS, empresa actualmente encargada de la seguridad del aeropuerto de San Pablo en Sevilla. Pero todos estos pasos lo decidirán los trabajadores en una asamblea, ha explicado a este periódico el CSI-F.
Hay que recordar, que a finales del 2016 se cambió la concesión de la empresa de seguridad y entró Prosegur SIS. «Hubo muchos despidos sin ninguna excusa», ha afirmado el sindicato, que a su vez ha aclarado que muchos de los trabajadores sobrepasan los límites de horas extra establecidos por la ley –no deben pasar las 80 horas al año y hacen más de 100 mensuales–. Por esta razón no «se entienden» los despidos porque la empresa sigue «aplicando horas extra» a los trabajadores. Además, han explicado que la delegación de Prosegur SIS en Sevilla «tiene la posibilidad de reubicar a estos empleados en otras zonas y no lo hace».
Denuncian los trabajadores que no se está cumpliendo lo acordado con el plus de Radioscopia Aeroportuaria que firmaron con la anterior empresa, Trablisa (que también rebajó los pluses), y que la actual debía respetar. «Prosegur SIS cambia el criterio del pago del plus y los paga a la baja argumentando que no todo el mundo hace esos servicios, pero eso no es así», han aclarado las fuentes mencionadas.
Actualmente la empresa Prosegur SIS cuenta con unos 600 trabajadores en Sevilla, una merma aproximada de 50, según ha declarado CSI-F. Al respecto, cada trabajador cobra una media de 1.000 euros netos en los que ya van metidas las pagas y los pluses. Ha afirmado los empleados que «en los últimos años han perdido una media de 150 euros de su nómina mensual».
A pesar de las negociaciones mantenidas con la empresa «no hemos conseguido nada –ha dicho el sindicato–. Es imposible hablar con la empresa porque todo termina en demandas y la justicia es muy lenta». Por esta razón, ha argumentado CSI-F que propondrán al personal tomar medidas drásticas al respecto. Aunque finalmente serán los trabajadores de seguridad del aeropuerto de San Pablo los que decidirán si realizan paros y si van a la huelga.