SENTANDO JURISPRUDENCIA
La noticia es reciente y tiene mayor calado del que parece. El ayuntamiento de Villena no tiene competencias para negar los permisos para celebrar una corrida de toros en el coso local. Así lo recoge la sentencia de un juzgado de Alicante que sirve de aviso para navegantes de todo el territorio nacional. La sentencia, en definitiva, vuelve a señalar la Tauromaquia como un patrimonio cultural, lo que implica un deber de protección por parte de los poderes públicos. Resumiendo: no pueden colocarse obstáculos insuperables que impidan la celebración del espectáculo taurino como era intención del consistorio de la localidad alicantina o pretendía, entre líneas, la llamada ley de ‘toros a la balear’, que también ha sido tumbada en el Constitucional. La Fundación del Toro se anota así dos nuevos éxitos que deberían ir acompañados de la reacción de los sectores profesionales. Una cosa es que se puedan dar toros; otra muy distinta es que las gentes de este singular planeta decidan remangarse. El caso es que el toro no se apea del escaparate sociopolítico. Ya se lo contamos días atrás en El Correo. El documento definitivo –suscrito entre el PP y VOX- que ha cerrado la gobernabilidad de Andalucía contiene una mención expresa para blindar el mundo de la Tauromaquia. Esperemos que esa premisa no se convierta en otro “papel mojado” para las huestes naranjas de Albert Rivera y su vicario andaluz, el señor Marín. Unos llegan y otros se marchan y no sabemos qué pasará con el trabajo avanzado por Demetrio Pérez, director general cesante de Emergencias e Interior que se ha batido el cobre con todas las familias profesionales del toro para avanzar un texto normativo con vocación integradora que iba más allá de los tres o cuatro campanazos –sin recorrido- que acapararon algunos titulares alarmistas. El asunto merecería ser tomado en el punto que se dejó.
EL DRAMA DEL SORO
No se trata de hacer noveleos. Pero el aura maldita de aquel cartel de Pozoblanco –Paquirri, Yiyo y el propio Soro- parece perseguir al célebre diestro valenciano, que lucha por salvar una pierna que ya ha vivido demasiados infiernos. Unas dolencias cardíacas obligaron a realizar un cateterismo desde la ingle hasta su corazón. Ésa fue la puerta de entrada de una gravísima infección que podría determinar la amputación de toda la extremidad. La familia del toro se ha estremecido con este angustioso trance que añade un nuevo capítulo de dolor a la lucha del matador por no quedar inválido. Hay que retroceder hasta 1994. Una compleja lesión de rodilla sufrida el año anterior acabó precipitando su retirada sumiéndole en un interminable rosario de operaciones –hasta 34 pasó por el quirófano- que culminó con la colocación de una prótesis biónica. Aquella ‘nueva’ pierna, contra todo pronóstico, le permitió reaparecer en los ruedos y hasta volverse a vestir de luces en la feria de Fallas de 2015 y 2016. A partir de ahí las cosas se han complicado; mucho...
COSAS DE LAS QUE SE HA HABLADO ESTOS DÍAS
La última noticia es de este mismo lunes. El incendio de la Huerta de San Antonio, la finquita cigarrera de Morante, ha refrescado las imágenes de aquellas pintadas insultantes y amenazantes que trataron de aguarle la navidad al matador de La Puebla. El incendio ha afectado a algunas instalaciones y almacenes y según las primeras versiones podría haberlo provocado un calefactor doméstico empleado para calentar unos cachorros recentales. Otras versiones apuntan a que las llamas podrían haber sido intencionadas... Esperemos que no sea así. Morante podrá desquitarse sintiendo otro tipo de calor, el de su propio pueblo, en las inminentes fiestas de San Sebastián. Todo está a punto para ese encierro matinal y la novillada de promoción vespertina que saludan la onomástica del santo patrón. Merece la pena vivirlo un año, contemplando a Morante en su mejor salsa. Por cierto, el propio Santiago Abascal se ha erigido en portavoz del torero a través del altavoz de Twitter. “Me pide el maestro Morante de la Puebla que os traslade su agradecimiento por vuestra preocupación. Pero pide a todos tranquilidad porque ni personas ni animales han sufrido daños. Desea también prudencia y que nadie adelante conjeturas sobre las causas del incendio”. Pues eso. Y ya que andamos por el Guadalquivir remontaremos sus orillas más de 150 kilómetros. En el toreo también se ha comentado estos días la extraña desaparición de un busto del todopoderoso Guerrita que había sido retirado de su lugar habitual –en el que llevaba más de 30 años instalado- por no sé qué obras. La denuncia del matador retirado José Luis Moreno –que es concejal popular en el ayuntamiento de Córdoba- ha obligado a reconocer a las autoridades municipales que la escultura no está en los almacenes de la Junta de Andalucía en la que había sido depositada. Dicen que ha sido robada. El ridículo es cósmico. Y vamos recogiendo velas, enviando nuestra más sincera enhorabuena a Francisco Rivera Ordóñez, recentísimo padre de otro Francisco Rivera en la saga. Apellidos toreros no le faltan al chico, nieto de Paquirri; biznieto de Antonio Ordóñez; sobrino biznieto de Luis Miguel Dominguín; tataranieto del Niño de la Palma... El futuro dirá.