«Tenemos que saber qué modelo de feria soporta la ciudad»

El invierno taurino ya se encuentra a medio camino de la temporada que se fue y la que está por venir. Es el mejor momento para conocer el balance y los proyectos del gerente de la empresa Pagés, Ramón Valencia, que en 2016 logró la paz con las figuras del llamado G-4

02 dic 2016 / 08:56 h - Actualizado: 03 dic 2016 / 00:59 h.
"Real Maestranza"
  • Ramón Valencia posa en la gerencia de la empresa Pagés, que ocupa en solitario desde la jubilación de Eduardo Canorea / José Luis Montero
    Ramón Valencia posa en la gerencia de la empresa Pagés, que ocupa en solitario desde la jubilación de Eduardo Canorea / José Luis Montero

La vuelta de las fiestas navideñas pondrá a la empresa Pagés a pleno rendimiento. Pero algunos contactos ya han comenzado. Se trata de dar forma a la temporada 2017 manteniendo la entente cordiale con las principales figuras sin dejar de sortear los nefastos efectos de la crisis económica.

En la calle le dan hecho el cartel de Resurrección...

–No hay nada hecho, absolutamente nada, porque es sabido que comenzamos a hacer los carteles a partir del 7 de enero pero es un clamor y ahí está. Ante eso no nos podemos negar. Dios dirá...

Pero las negociaciones se habrán anticipado a la llegada de los Reyes Magos.

–La ausencia de las primeras figuras forzó el adelanto de esas conversaciones. Era un mero posicionamiento para la temporada siguiente. En esa línea ya ha habido algunos acercamientos, es verdad, pero sin matizar aún nada concreto.

Hablando del apartado económico, se esperaba una reacción más positiva del abono. ¿El nuevo cliente es el espectador ocasional?

–Esos modelos son consecuencia de la economía del momento pero nos gustaría que el abono alcanzara un promedio de 5.000 abonados. No sólo se trata de salvar la empresa, también es una salvaguarda para garantizar la categoría del resto de los carteles. El año pasado se hizo un gran esfuerzo y el público no respondió. Esta es la segunda feria más larga del país y la hemos acortado. Tenemos que comprobar poco a poco cuál es el modelo que soporta la ciudad.

-La feria de San Miguel demostró que se pueden plantar otro tipo de carteles -jóvenes alternando con consagrados- y que funcionan.

–El día que menos, hubo tres cuartos largos pero no dejan de ser carteles de alto presupuesto y difíciles de defender. San Miguel merece esa apuesta y se podría plantear un ciclo de tres días. Y creo que ese esfuerzo lo agradece la ciudad. Sevilla no se apaga en Abril pero el público tiene que responder.

Hablábamos de nuevos modelos, de la idiosincrasia actual de la ciudad... estamos en tiempo de cambios.

–Estamos planteando cambiar de fecha algunas novilladas dominicales. En mayo medio se soportaba porque el público aún no se marcha a las playas pero estábamos comprobando poco a poco la dureza de los fines de semana de junio. Se van a cambiar a la noche de los jueves en base a la experiencia que se tiene con las becerradas.

La empresa Pagés no se ha sentido demasiado cómoda con el adelanto del comienzo de la Feria de Abril.

–A la empresa de la plaza de toros de Sevilla se le podría haber consultado su parecer al respecto. No todo es el jolgorio de la Fiesta en sí. El apartado taurino es potente y creo que se debería haber producido esa consulta pero imaginamos que esa conversación llegará. Analizando el asunto a nivel ciudadano hay un hecho concreto: si se adelanta el comienzo de la Feria también se está adelantando la preferia. Estamos desvistiendo un santo para vestir a otro.

Morante fue determinante para el comienzo, pero también para el fin de las hostilidades de 2014 y 2015.

–Pero no quiero olvidarme del primer torero que rompió esos esquemas: es José María Manzanares y se lo debo agradecer. También a Enrique Ponce, que nunca ha dejado de venir y les debo un respeto. No puedo olvidar ese gesto. José Antonio es sevillano y las corridas que ha toreado en Sevilla son muy importantes para él, pero también para la ciudad. Morante quiere potenciar esta plaza en la medida que él pueda aportar y está mostrando que lo que aporta es mucho. Se ha abierto a todo tipo de carteles y por sí mismo es válido para tirar de una tarde. En las conversaciones que ya he tenido con él está por la labor de seguir en la misma línea

Como el turrón, en estas fechas vuelven las preguntas en torno a la presencia de José Tomás en Sevilla.

–Sólo depende de él. Se le ha llamado todos los años y no ha podido ser o no entraba en sus esquemas. Dentro de unos días volveré a llamar a su apoderado y se lo plantearé pero no sé cuál va a ser la respuesta. Si Tomás dice que quiere torear en Sevilla aquí tiene las llaves de la plaza.

¿Qué podemos decir de Roca Rey? Es la sensación...

–Es un revulsivo. Las figuras están respondiendo a ese acicate. Eso es muy bueno para la afición y si lo llevamos desde aquí, encantados de la vida...