Emprendimiento

España es la economía que menos ‘unicornios’ genera de los siete mercados a los que persigue

El ecosistema de ‘startups’ en su conjunto ya está valorado en más de 100.000 millones de euros, pero sobre todo con empresas en fases iniciales y con dificultades para crecer

Las oficinas de Factorial, una de las últimas 'startups' catalanas en convertirse en 'unicornio'.

Las oficinas de Factorial, una de las últimas 'startups' catalanas en convertirse en 'unicornio'. / FACTORIAL

Paula Clemente

Avanza a ritmo aparentemente imparable, pero siempre atado a la que se está convirtiendo en su zona de confort. El fenómeno ‘startup’ coge volumen en España como en ninguna otra de las principales economías europeas, y, aun así, ni recorta distancias con sus competidoras ni logra superar su condición de mercado que crea empresas emergentes, pero no las escala. Mientras que las operaciones de inversión destinadas a financiar los primeros pasos de estos proyectos tecnológicos están en niveles de récord, hay menos dinero participando en ‘megarondas’ que antes de la pandemia. Además, mientras que los tres países con más ‘unicornios’ van sumando otros casi de diez en diez, España lleva dos años que apenas crea 4. Por no hablar, de que todavía ninguna de sus empresas tecnológicas ha alcanzado los 10.000 millones de euros de valoración.

Así lo desgrana la segunda edición de un informe que elabora Dealroom junto a algunas de las figuras más importantes involucradas en este mercado: KfundWayraSpaincapEndeavorGohub VenturesBBVA Spark y Enisa. Esta conjunción de fuentes de datos permite descubrir que el conjunto de ‘startups’ que operan en España ya vale más de 100.000 millones de euros (105.000 millones, a juzgar por los datos de 2024), que está entre los equipos más importantes de la liga UE, por detrás de Alemania –que alcanzó los 100.000 millones de euros de valoración hace 9 años–, Francia –lo hizo hace seis–, Suecia y Dinamarca. O que, habiendo multiplicado casi por tres su tamaño respecto a 2019, es el segundo mercado que más crece en Europa, un ránking que lidera Noruega.

La cuestión es que, en el otro lado, hay toda una serie de datos que evidencian que si todo esto ocurre es porque cada vez se crean más empresas en la base y hay más dinero para acompañarlas en estas primeras fases, pero no está ocurriendo, como cabría esperar de un entorno bien engrasado como este, que haya cada vez más compañías despuntando por su tamaño y proyección.

“Las inversiones ‘early-stage’ [en fases iniciales] siguen dominando en España, con compañías recaudando hasta 15 millones por ronda”, subraya Kfund en el comunicado que acompaña la publicación del informe. “Hay una notable desaceleración en las rondas ‘growth’ [dedicadas a crecimiento] y ‘late-stage’ [últimas fases antes de la venta o la salida a bolsa]”, detalla este texto, que también sostiene que la comparación entre Europa y España pone todavía más de manifiesto esta tendencia. “Si bien España supera al mercado europeo en general en rondas de inversión en etapas iniciales, se queda atrás en rondas más grandes”, sintetiza.

Pocos unicornios, mucho fondo internacional

Como consecuencia, no están surgiendo tantos ‘unicornios’ como se esperaba hace unos años. De acuerdo con estos datos, en España hay un total de 18 empresas de este estilo valoradas en más de 1.000 millones de dólares (o que hayan llegado a alcanzar ese umbral en los últimos años). Son 32 en Suiza y en los Países Bajos, 42 en Suecia, 52 en Francia, 70 en Alemania y 171 en Reino Unido. Y entre 2022 y 2023 han ganado 7 Suiza, 5 los Países Bajos, 6 Suecia, 14 Francia, 10 Alemania y 41 el Reino Unido. Lejos, en definitiva, de los 4 que ha sumado España, que todavía no tiene siquiera ningún ‘decacornio’ (una compañía valorada en más de 10.000 millones de dólares)

Si bien hay cierto debate en torno a la importancia de este sello y a cuan sano es competir en una liga en la que suele tener más peso las rondas de inversión cerradas que la facturación cosechada de forma orgánica, lo que muestran estos datos es que la norma, en España, es no terminar de dar el salto a ligas de mayor envergadura. Así ocurre que las rondas de financiación cerradas con la participación de algún fondo extranjero e incluso solo con inversores internacionales están ganando cada vez más peso en España (son el 40%, actualmente, frente al 30% de antes de la pandemia) o que Estados Unidos arrase en 2023 como país de origen de las operaciones para financiar las fases ‘late-stage’.

“En resumen, el informe ilustra la situación actual del mercado español: hay un vigor prometedor en los proyectos en fases iniciales, que están a punto de consolidar su presencia en fases de negocio más avanzadas”, compendia Kfund. “Pese a haber desafíos, se están logrando avances constantes y anticipamos que esta consolidación continuará fortaleciéndose en los próximos años”, augura el mismo fondo.