Verano

Si vivo de alquiler, ¿tengo derecho a usar la piscina comunitaria? Esto es lo que dice la Ley

El uso de las piscinas comunitarias son uno de los elementos que más conflicto suele generar en la comunidad de vecinos

Imagen de archivo de una piscina.

Imagen de archivo de una piscina. / EUROPA PRESS

El Correo

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Comienza el calor y es habitual que lleguen con él los conflictos por querer disfrutar de la piscina del edificio por eso, es necesario que conozcamos cuáles son los derechos y obligaciones para el uso de esta zona común y que no haya problemas entre propietarios e inquilinos.

Si alquilas un piso, tienes derecho a usar la piscina comunitaria del edificio. Esto se debe a que, según la Ley de Propiedad Horizontal (LPH), el arrendatario tiene derecho al uso y disfrute de las zonas comunes del edificio, incluida la piscina, siempre y cuando se cumplan las siguientes condiciones:

Que el propietario haya cedido el uso de la piscina al inquilino. Esto suele estar especificado en el contrato de alquiler. Si no está especificado, el inquilino debe preguntar al propietario.

Que el inquilino cumpla con las normas de la comunidad de propietarios que regulen el uso de la piscina. Estas normas pueden incluir aspectos como el horario de apertura, la limpieza, la seguridad, etc.

Excepciones del uso de la piscina

Hay algunas excepciones en el uso de zonas comunes, ya sea piscina, pista de padel, tenis u otras zonas de ocio y ellas son la siguientes:

Que la piscina esté expresamente excluida del uso del inquilino en el contrato de alquiler por diferentes motivos.

Que la comunidad de propietarios haya acordado en una junta que los inquilinos no pueden usar la piscina. Esta decisión debe tomarse por mayoría de los propietarios presentes en la junta.

Otra de las causas un tanto problemáticas en las comunidades de vecinos es que el propietario pretenda disfrutar de la psicina a pesar de que hayan alquilado la vivienda, ya que piensan que, como propietarios, tienen derecho a utilizarla. En ese caso no podrán disfrutar del uso propietario e inquilino.

Pero si la vivienda está alquilada, solo puede usar la piscina el inquilino, así como otras zonas comunes de ocio como una pista de padel o tenis.