-El principal motivo es que tengo ánimos para seguir, sobre todo ahora que el traslado a nuestra nueva ubicación se ha producido y se ha puesto fin a esa etapa turbulenta. El próximo curso va a llegar la implantación del Plan Bolonia y llegarán los grados y los másters, y en este mandato hemos elaborado proyectos para ese futuro cercano y queremos estar ahí y desarrollarlos.
-El pasado 11 de diciembre se cumplió un año del traslado de la Fábrica de Tabacos a su actual ubicación. ¿Qué balance realiza de estos 12 meses?
-Creo que ya se ha superado esa nostalgia por el edificio del Rectorado. Este centro nos va a mantener y abundar en la trayectoria de excelencia que tiene esta facultad. El prestigio de Derecho viene dado por su investigación excelente y el reto, con este nuevo edificio, es desarrollar más la investigación y mejorar en la docencia, con las nuevas instalaciones: más aulas, más comodidad, mejores bibliotecas, nuevos servicios informáticos... Un traslado como el nuestro implica siempre que se genere caos pero se ha realizado bastante bien.
-¿Qué oferta de másters tendrá Derecho para el curso 2010/2011?
-Están pendientes de aprobación por las comisiones autonómicas y nacional competentes, pero, en principio, son siete más uno de Abogacía. Éste está teniendo polémica porque la definición que le ha dado el Gobierno central no convence a los Colegios de Abogados, que piden más cuota de participación. Si finalmente no hay acuerdo, nuestra facultad sacará un máster de título propio.
-¿Cómo ha evolucionado el número de alumnos en los últimos años?
-Está creciendo año tras año. En parte, esto se debe a que se sabe que entre 2010 y 2015 casi el 60% del funcionariado de las administraciones autonómicas se jubilará y el alumno de derecho es el más preparado para acceder a ese mercado de trabajo. De todos modos, hay 6.000 alumnos, muy lejos de nuestro pico histórico: los más de 10.000 de 1989. Aunque aquello supuso una saturación.
-¿Lleva propuestas sobre empleo en su programa para las elecciones?
-Vamos a crear una bolsa de trabajo en la facultad y un vicedecano se encargará de las prácticas de los abogados.
El Perfil
No sólo se presenta a la reelección con el aval de los últimos cuatro años al frente del Decanato en Derecho sino con una trayectoria que abarca cuatro décadas de docencia, investigación y publicaciones. Este catedrático de Historia del Derecho de la Hispalense desde 1981 ha centrado su carrera y trabajos en la protección de los débiles (tiene un libro publicado sobre la tutela del menor), el reparto justo de la riqueza (una de sus obras versa sobre la reforma agraria) y la concordia social, los tres ejes por los que ha transcurrido y que marcan su trayectoria.
