A falta de conocer la sentencia del juicio por el presunto espionaje a las cajas sevillanas, el caso sigue dando que hablar. Un juez ha archivado la denuncia por el robo de la segunda cinta, en la que El Mundo se basó para acusar a Chaves del seguimiento.
Un juzgado de Sevilla ha archivado la ampliación de la denuncia por el robo de la segunda cinta -en la que se basó la noticia del diario El Mundo para acusar al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, de ordenar el espionaje al ex presidente de la Caja San Fernando, Juan Manuel López Benjumea-, pues no han aparecido nuevas pruebas que permitan seguir con las diligencias de investigación.
Fuentes judiciales informaron que el Juzgado de Instrucción 8 de Sevilla, que recibió la ampliación de la denuncia, ha emitido una providencia en la que se remite al primer archivo de la causa, dictado en 2005 y basado en la falta de autor conocido.
El juzgado recibió el pasado 28 de noviembre la ampliación de la denuncia, cuando el secretario del Juzgado de Instrucción 1 de Sevilla se percató, tras descubrirse la semana pasada en el juicio que las dos copias del vídeo habían desaparecido, de que en el robo sufrido el 27 de julio de 2005, le habían robado en realidad las dos cintas del espionaje y no sólo una.
Confesión
En ambas cintas, el supuesto espía Antonio Castellano confesaba, presuntamente al verse descubierto, que Manuel Chaves y otros dirigentes socialistas andaluces le habían ordenado seguir a los presidentes de las cajas de ahorro, en un momento conflicto por la renovación de cargos.
Dichas cintas, que según la acusación del PSOE eran "un montaje obvio", fueron aportadas al juzgado por el ex presidente de caja San Fernando Juan Manuel López Benjumea, y por el diario El Mundo, que la utilizó como base de la noticia que publicó el 29 noviembre de 2001.
El Juzgado de Instrucción 1 sólo denunció en un principio el robo de una de las cintas hasta que el pasado día 28, cuando se la reclamaron para el juicio, se percató de que en realidad le habían robado las dos, que guardaba unidas por un elástico en el interior de su caja fuerte.
La denuncia por el primer robo fue sobreseída por falta de autor conocido y ahora el Juzgado número 8 se ha remitido a dichos argumentos para archivar también la ampliación, ya que no han aparecido nuevos datos que permitan reabrir la investigación, más aún cuando han transcurrido más de dos años desde la sustracción. Ante la falta de las dos cintas, pedidas como prueba por las acusaciones, el Juez de lo Penal 3 admitió una copia del audio que hizo la Policía para su peritaje.
El juicio, que quedó visto para sentencia el pasado 29 de noviembre, se dirigió contra López Benjumea; el detective al que contrató, Joaquín Corpas; y los periodistas Francisco Rosell y Javier Caraballo, acusados por Chaves y otros líderes socialistas de un delito de injurias por publicar una información que consideran falsa.
