Deportes

El Betis recibe al Real Unión con media columna vertebral de vuelta

El Betis recibe al Real Unión. Antonio Tapia recupera a Arzu, Carlos García y Pavone y además ha citado a Sunny e Israel. Melli, en cambio, paga su pésima actuación en Vallecas.

el 10 oct 2009 / 21:57 h.

Manolo Jiménez gesticula en la banda

El Real Unión, un histórico del fútbol español que por esas cosas del azar jamás se ha enfrentado al Betis en un partido de Liga, visita hoy Heliópolis por segunda vez en menos de un año y por primera vez en su historia para disputar un partido de Segunda. Un rival menor que acaba de llegar desde la Segunda B, podría pensar algún bético incauto, pero precisamente cautela es lo que sobra en el conjunto verdiblanco y su entorno. De eso se encarga Antonio Tapia, que no tiene a los suyos invictos desde la segunda jornada por casualidad. Han sido cuatro partidos ante adversarios teóricamente potentes (Recreativo, Albacete, Cartagena y Rayo) y el técnico cordobés, como es obvio, quiere que la racha no se acabe ahora que llegan las etapas llanas. Primero el Real Unión, luego el Castellón, después el Girona... Parece una ocasión ideal para reencontrarse con los puestos de ascenso, pero como seguramente diría el propio Tapia, sólo lo parece.


El Betis afronta este histórico e inédito encuentro liguero con más ventajas que desventajas. La primera y principal es su superioridad, a priori, sobre una escuadra recién ascendida y sin futbolistas de especial renombre, si acaso Descarga (ex Levante) y Brit (ex Numancia), aunque el Real Unión ha entrado en la temporada con notoria dignidad, como refleja su ubicación en la mitad de la tabla. La segunda es la recuperación de tres hombres fundamentales: dos son los centrales titulares, Arzu y Carlos García, una vez pagados los excesos de Pino Zamorano frente al Cartagena, y el otro es Pavone. Huelga recordar los problemas que viene sufriendo el Betis para evitar los goles contrarios (véase lo sucedido en Vallecas, con especial atención a los centrales sustitutos) y tampoco hace falta repetir la importancia del delantero argentino en el entramado ofensivo verdiblanco. Y aún queda un tercer factor a favor: el campo. El Betis lleva siete de nueve puntos en Heliópolis, donde todavía no ha recibido ningún gol en contra.


Las desventajas, básicamente, están concentradas en la consulta del médico. Esta semana la han visitado dos jugadores que no se despegaban del once titular ni con agua caliente y que ahora tardarán un tiempo en salir de la enfermería: Nacho y Damiá. Si a ellos se les suma Juanma, resulta que se trata de tres hombres de banda. Ante semejante contrariedad, el míster incluyó ayer en la convocatoria a la otrora gran promesa Israel, que no tiene minutos con el primer equipo desde el 11 de diciembre de 2005, ahí es nada. En medio, un año para olvidar en el Mérida y un par de temporadas sin pena ni gloria otra vez en el filial. De todas formas, el chaval (aún tiene 22 años) no será titular ni mucho menos. Lo será Odonkor salvo que Tapia revolucione el once y elija a Sergio García para la derecha, en cuyo caso el acompañante de Pavone saldría del dúo formado por Capi y Rodri; esta alternativa se antoja más extraña.


Hay dos novedades más en la lista: Ricardo, que empieza ahora su rotación de dos jornadas como suplente de Goitia; y Sunny, en blanco desde que fue expulsado en Alicante y luego se lesionó. El hispanonigeriano, de vuelta tras un mes KO, ocupa el lugar de Emana, cuya ausencia por compromisos internacionales representa el segundo gran inconveniente en el Betis. Las bajas de Melli y Nano, ambas por estricta decisión técnica, no merecen considerarse ni novedosas. En el caso del canterano, por su pésima actuación en Vallecas. En el caso del manchego, porque si fue citado la semana pasada se debió sólo a la epidemia de bajas en el puesto de central.

  • 1