El museo reabrió ayer sus puertas con nuevos espacios. / El Correo
Carmona vuelve a contar desde este fin de semana con uno de sus principales atractivos culturales y patrimoniales: el Museo de la Ciudad. Tras varios meses cerrado por las obras de mejora y ampliación de contenidos, este histórico edificio se ha reabierto con el objetivo de seguir atrayendo la atención de miles de visitantes.
Las obras han consistido de manera principal en la rehabilitación de las cubiertas de este edificio histórico para devolverles las condiciones de estanqueidad y estabilidad estructural, que se encontraban muy mermadas en varias zonas. De hecho, las cubiertas estaban muy afectadas por filtraciones, goteras, desprendimientos, ataques de hongos e insectos. Asimismo, la falta de mantenimiento de las mismas a lo largo de los años o la escasa calidad de algunas de las reparaciones realizadas en las mismas no habían podido frenar su deterioro. En esta actuación se han invertido más de 360.000 euros.
La rehabilitación del Museo ha supuesto la reposición de la viguería de madera por una de similares características y el acondicionamiento para su incorporación al nuevo recorrido expositivo. Su restauración permite además, en la sala de época moderna, observar algunas de las tablas pictóricas procedentes del artesonado mudéjar de la iglesia de Santa Ana.
Se han acondicionado también las salas romanas para hacerlas más interactivas, diseñando nuevas vitrinas y pantallas táctiles. Se abren también nuevas salas y se exponen piezas restauradas recientemente procedentes de las últimas excavaciones. Por ejemplo, se incorporan las piezas de las tumbas romanas de la calle Juan Fernández López, junto a elementos arquitectónicos de las recientes intervenciones, como el mosaico de la fuente de la domus, situada en la calle Paso de la Duquesa.
Previa a esta reapertura, y en colaboración con la Colección Museográfica del Ayuntamiento de Gilena, se ha desarrollado una actividad de recreación histórica: desde el Alcázar de la Puerta de Sevilla, una legión romana ha recorrido varias calles de Carmona haciendo distintas demostraciones de tácticas de ataque y defensa hasta llegar al Museo, donde fueron los primeros en abrir sus puertas.
