El coordinador de Justicia del PP, Federico Trillo, anunció que si su partido accede al Gobierno central introducirá la revisión "integral del sistema de penas y la introducción como pena máxima de la prisión perpetua revisable que ya tienen hasta 14 países europeos y que está apoyada por el 82% de la opinión pública".
Además, añadió, durante su participación en la mesa Una democracia ejemplar celebrada durante la Convención Nacional del PP que se celebra en Málaga, que los populares restablecerán el recurso previo de inconstitucionalidad "para que no vuelva a producirse lo ocurrido en las legislaturas de Zapatero con los estatutos de autonomía".
También propuso reformas para profesionalizar la elección de miembros del Consejo General del Poder Judicial y para limitar el poder del fiscal general del Estado.
No fue el único anuncio espectacular en la convención, el gran hito de la precampaña del PP y cuyo lema es "Empieza el cambio". Así, el vicesecretario general de Comunicación, Esteban González Pons, afirmó que "el empleo es el bienestar" y aseguró que el Partido Popular "aspira a recuperar cada puesto de trabajo que se ha perdido en esta crisis", así como el poder adquisitivo de jubilados y funcionarios, recortado desde las reformas del año pasado.
"Estamos comprometidos con el Estado de Bienestar y defendemos el modelo con uñas y dientes", apostilló.
Durante su intervención, González Pons abogó por "la educación y la sanidad públicas" y pidió una ley que proteja a las personas mayores "frente a los abusos que sufren de muchas grandes empresas", y "que nadie recorte nada a los españoles"."Con menos aspiración nadie tendría derecho a presentarse ante cinco millones de españoles en el paro, por lo que a los socialistas esta ambición se les tiene que contagiar", consideró el dirigente del PP, quien avisó de que en España "ha fracasado el Gobierno, pero no el país; han fracasado los que lo gobernaban, no los españoles: lo que le pasa a los españoles es culpa del Gobierno y los únicos que se merecen el paro son Zapatero y Rubalcaba".
