La unidad de los reinos de lo que hoy es España la lograron los Reyes Católicos, pero fue el 2 de mayo de 1808 cuando los españoles tomaron conciencia de su identidad nacional. La base de aquello, según el rey Juan Carlos, fueron las ideas de "libertad, unidad, igualdad y solidaridad".
La Familia Real presidió ayer en Móstoles los actos de conmemoración del Bicentenario del levantamiento de los españoles contra las tropas francesas, una ceremonia que congregó a unas 20.000 personas en las calles y que constituyó un canto a la libertad y a la independencia.
Don Juan Carlos, que recibió la Medalla de Honor del Ayuntamiento de Móstoles, rindió un homenaje al pueblo español y a los caídos en la Guerra de la Independencia y señaló que el 2 de mayo de 1808 se adelantó a sus gobernantes e instituciones y reflejó "una toma de conciencia de identidad nacional, de la nación, basada en las ideas de libertad, unidad, igualdad y solidaridad".
"Entre 2008 y 2012 se cumplirán, en suma, dos siglos de un periodo histórico que marcó al mundo hispánico en su conjunto y que contribuyó decisivamente a configurar los perfiles de la nueva América y de la España moderna y constitucional", concluyó el Rey.
Tras recibir de manos del alcalde de Móstoles, Esteban Parro, la medalla, don Juan Carlos recordó que tal día como ayer hace 100 años su abuelo, el rey Alfonso XIII, disfrutó de los mismos actos de celebración de un hecho que "unió de forma indeleble el nombre de Móstoles a la historia de España y de Europa".
El Rey destacó que el 2 de Mayo fue una jornada en la que el protagonista fue el pueblo español, "verdadero titular del ser y el destino de la Nación". "La jornada de aquel 2 de mayo marcó el inicio de una intensa y heroica gesta de lucha colectiva por la soberanía y la libertad", apostilló.
"Este es el homenaje de gratitud al sacrificio de todos los hombres y mujeres, pueblos, ciudades y territorios de España que se levantaron conforme a unos ideales que marcarían el tránsito a una sociedad liberal", agregó. "Hoy, al cabo de dos siglos, aquel episodio representa la encarnación de la dignidad de un pueblo que, como dijo el poeta, no podía ser esclavo porque supo morir", afirmó.
El Rey intervino en el salón de plenos del consistorio, en presencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y del jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix Sanz, además de otras altas autoridades. Los presentes elogiaron a los héroes del Dos de Mayo y en especial a los alcaldes de Móstoles Andrés Torrejón y Simón Hernández, cuyo bando supuso el inicio de la Guerra de la Independencia.
España moderna. En su intervención, José Luis Rodríguez Zapatero recordó que desde el 2 de mayo de 1808 los españoles han recorrido dos siglos al cabo de los cuales "han prevalecido los mejores propósitos de quienes nos precedieron: la realidad de una Constitución estable que ordena y protege nuestra convivencia y una idea moderna de España concebida como una sociedad de ciudadanos libres e iguales", aseveró.
Por último, Esperanza Aguirre destacó que la sublevación consiguió al cabo de los años "salvar una patria que estaba en peligro". Aguirre afirmó que "nadie" dudó de la fuerza del levantamiento de los madrileños, así como nadie dudó "de lo que era España". "Si se siguió el grito desde Móstoles es porque (los españoles) tenían la certeza de que ya formaban parte de una gran nación", resaltó.
