Iberia transportó en 2008 más de 33,5 millones de pasajeros, casi 7 millones menos que en el ejercicio anterior, lo que supone un recorte del 17%, según recogen las estadísticas de tráfico aéreo de AENA. Además de la debilidad de la demanda por la crisis económica y la reducción de la oferta del sector de transporte aéreo, las compañías que operan en el mercado español se han visto afectadas por la competencia del tren de alta velocidad, especialmente en la ruta Madrid-Barcelona.
Debido a estos factores, durante el primer semestre de 2008, Iberia fue perdiendo su volumen de pasajeros a un ritmo que oscilaba entre 200.000 y 600.000 mensuales, mientras que a partir de julio la caída se aceleró hasta los 700.000.
Por su parte, Spanair, a pesar de su programa de viabilidad, que implicó una reducción de rutas y capacidad en el segundo semestre del año, y el accidente de uno de sus aviones en Barajas, que costó la vida a 154 personas el pasado agosto, mantuvo su segunda posición en España, con un total de 16,8 millones de pasajeros. Esta cifra significa 2,2 millones de pasajeros menos que en 2007, es decir una disminución del 11,4% en comparación con los 19 millones de ese año.
Hasta el accidente de Barajas, Spanair registraba cada mes cifras similares a las de 2007. Después de la tragedia, en agosto transportó unos 200.000 pasajeros menos, volumen que escaló hasta 400.000 en los meses posteriores.
En 2008, la aerolínea de bajo coste irlandesa Ryanair relevó a Air Europa de su tercer puesto en España, con 14,9 millones de pasajeros transportados, un 33,6% más que en 2007.
