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La huelga de basuras en Rota no es aún riesgo para la salud pública

La Junta no ve necesario ampliar los servicios mínimos porque "casi todas las bolsas" están cerradas, así que los residuos no se pudren y no entran ratones.

el 09 ago 2012 / 20:56 h.

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La alcaldesa de Rota (Cádiz), María Eva Corrales solicitó ayer a la Viceconsejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía que amplíen los servicios mínimos que estableció para la huelga de limpieza que sufre la ciudad desde el pasado lunes, ya que según explicó son "totalmente insuficientes". Rota triplica en agosto su población y por lo tanto también el volumen de residuos que se genera diariamente. Por ello, la alcaldesa instó a la Junta a considerar el problema de salud pública que podría crear esta huelga de carácter indefinido, que se "agrava" con por servicios mínimos "insuficientes", y que, además, está repercutiendo "muy negativamente" en el turismo.

Ante la queja, la Delegación provincial de Salud de la Junta de Andalucía en Cádiz actuó de oficio enviando a la localidad gaditana a una inspectora en cuyo informe aseguró que la situación higiénico-sanitaria en el munidicipio es "leve" y que, por lo tanto, no existe riesgo para la salud de la población. Según contempla en el informe "prácticamente no hay puntos de la ciudad donde la basura no esté guardada en bolsas, lo que evita que se pudra y que puedan aparecer roedores o insectos", aunque debido a las altas temperaturas recomendó una vigilancia "constante".

La alcaldesa informó que el pasado viernes el Ayuntamiento abonó un total de 115.000 euros a la empresa FCC, concesionaria del servicio de limpieza, siguiendo el calendario de pago establecido entre el Ayuntamiento y la empresa. Una cantidad que se suma a los más de nueve millones que cobró recientemente la concesionaria FCC gracias al plan de pagos a proveedores del que se benefició el Ayuntamiento.

La portavoz del equipo de gobierno, María Angeles Sánchez, se mostró contundente al pedir a los trabajadores y a la empresa FCC a replantear su postura en este conflicto ya que, "a estas alturas", el Ayuntamiento no tiene conocimiento de que existan "indicios de acercamiento" entre los trabajadores y la empresa. Los empleados, por su parte, acusan a la alcaldesa de haber contratado un servicio de limpieza alternativo.

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