La masa de humo provocada por la quema de pastos que desde hace días cubre a Buenos Aires y sus alrededores disminuyó ayer a raíz de un cambio en la dirección del viento, aunque en las próximas horas se espera que vuelva a incrementarse.
"El viento cambió y comenzó a ir en dirección Este, lo que hizo que disminuyera en Buenos Aires y continuara afectando a Entre Ríos y Santa Fe. Fuentes del Servicio Meteorológico Nacional pronosticaron, no obstante, que el viento no iba a tardar en rotar a dirección norte, con lo cual volvería la masa de humo" a la capital argentina.
Algunas ciudades del interior como Rosario amanecieron ayer envueltas en una densa humareda, que generó trastornos en el transporte, bloqueos parciales de carreteras y un incremento de la demanda en los servicios de los hospitales.