Joanne Hearst Castro, nieta del magnate estadounidense de la prensa William Randolph Hearst, ha sido encontrada muerta este miércoles en la finca en la que vivía en Gerena, en el norte de la provincia de Sevilla.
Fuentes del Ayuntamiento de Gerena han confirmado que Hearst Castro ha sido encontrada muerta por una de sus sirvientas poco después de las 10:00, en la vivienda principal de la finca La Caprichosa de la localidad, que había adquirido en 1984 tras ver varias similares en las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz.
Su idea era poner en marcha una yeguada, negocio al que se dedicaba principalmente en los últimos años, para lo que había comprado la finca, situada a tres kilómetros del casco urbano de Gerena, localidad de unos 7.200 habitantes, que había convertido en su casa.
Las causas del fallecimiento no se conocen aún, aunque fuentes familiares han indicado que el cuerpo, que se encuentra en el Instituto Anatómico de Sevilla, ha sido hallado en su habitación sin indicios de violencia, días después de regresar de Portugal, donde había sido sometida a una operación aparentemente sin importancia.
No obstante, a la espera de conocer los datos de la autopsia, la Guardia Civil ha abierto una investigación, y en la propia finca se guarda un mutismo total sobre este asunto.
Joanne Hearst Castro era la única nieta viva de Willian Randolph Hearst, aunque de él no había heredado su pasión por la prensa, y se mantenía como accionista de algunos medios, pero con dedicación a otros negocios en España.
Su abuelo, fallecido en 1951, consolidó uno de los más grandes imperios empresariales de la historia, llegando a poseer en su día hasta 28 periódicos de circulación nacional, como Los Angeles Examiner, The Boston American, The Atlanta Georgian, The Chicago Examiner, The Detroit Times, The Seattle Post-Intelligencer, The Washington Times, The Washington Herald.
Su principal cabecera era The San Francisco Examiner, y fue tal su fama que Orson Welles se fijó en él para inspirar Ciudadano Kane, película que se rodó y estrenó contra la voluntad de Randolph Hearst.
A la espera de conocer el resultado de la autopsia, las fuentes consultadas no han sabido confirmar si Joanne Hearst Castro será enterrada finalmente en Gerena o su cuerpo será repatriado a Estados Unidos.
