El consejero mayor de la Cámara de Cuentas de Andalucía, Rafael Navas, confió ayer en que los partidos se pongan de acuerdo en la renovación de esta institución y, sobre su futuro, aseguró: "Sigo teniendo cosas que hacer en la Cámara, me quedan algunas puntadas que dar".
Navas recordó que la renovación del órgano de extracción paralamentaria exige el respaldo de tres quintos de los parlamentarios (66 de los 109 diputados), lo que sólo se asegura con los votos del PSOE (56) y del PP (46), por lo que ambos partidos deberían llegar a un acuerdo político.
El consejero mayor no quiso pronunciarse sobre la polémica que ha suscitado este proceso, y se mostró convencido de "se irá solucionando". Navas, que aseguró estar a disposición del Parlamento, recalcó que en su equipo trabajan todos "con absoluta profesionalidad hasta el último momento". "Cuando llegue la hora, cogeremos nuestras cajitas -como en las películas americanas- y saldremos cada uno para su destino correspondiente", dijo.
polémica. La renovación de la Cámara de Cuentas debería haberse producido a mediados de septiembre pero está bloqueada después de la bronca entre PSOE y PP por las propuestas de candidatos para la renovación del Tribunal Constitucional. La falta de paridad tumbó la propuesta de los populares, que registraron dos hombres siguiendo una estrategia nacional que repitió los mismos dos candidatos en todos los Parlamentos autonómicos.
Después de ese episodio, el grupo popular aseguró que no está dispuesto a negociar nada. No es la primera vez que la paridad que exige el Parlamento en sus nombramiento abre una polémica. Ocurrió con la designación de los adjuntos al Defensor del Pueblo. Ahora, para cumplir la paridad y corregir además el desequilibrio en la Cámara de Cuentas (con seis consejeros y una sola consejera), PSOE y PP deberán registrar un hombre y una mujer cada uno.
No sólo la paridad está tras la disputa. También qué partido designará al candidato que ocupará el sillón de consejero mayor. Navas fue una propuesta del PP que los socialistas respaldan y que podría seguir otro mandato. Pero si el PP lo releva, los socialistas no dejarán ahora que un candidato popular se aúpe a la dirección. El socialista Manuel Gracia advirtió al PP de que no puede hacer depender la renovación de que el consejero mayor sea propuesto por los populares "porque no existen derechos adquiridos y porque no tienen mayoría" en el Parlamento.
