El soterramiento de la A-376 entre los barrios nazarenos de Montequinto y Condequinto será una realidad en 2011 y requerirá más de cuatro millones de euros, dentro de los 12 que la Consejería de Obras Públicas tiene previsto destinar a la adaptación de la Autovía de Utrera como bulevar metropolitano en el tramo entre los enlaces con la SE-30 y la futura SE-40.
Así lo anunció ayer la consejera, Concepción Gutiérrez, tras la firma del protocolo de colaboración con los alcaldes de los municipios por los que discurre la citada carretera y que se verán afectados por estas actuaciones: Dos Hermanas, Francisco Toscano; Alcalá de Guadaíra, Antonio Gutiérrez Limones ; y Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, los tres del PSOE.
A esta "sintonía política" atribuyeron los mandatarios el consenso sobre un proyecto, el del soterramiento, muy demandado por los vecinos de Montequinto, y que conseguirá integrar dos barrios actualmente separados por esta vía, e integrarlos con el núcleo principal de Dos Hermanas, a la vez que terminar con uno de los problemáticos cuellos de botella en uno de los principales accesos a Sevilla.
A través de este acuerdo, Obras Públicas se compromete a redactar los proyectos constructivos del nuevo diseño de la A-376, que estarán listos a finales de este año, mientras que los ayuntamientos deberán reservar los suelos necesarios para la puesta en marcha de estas propuestas incluidas dentro del plan metropolitano de transportes.
En este sentido, la consejera destacó que la "presencia" del Ayuntamiento de Dos Hermanas en la puesta en marcha del proyecto será "permanente, por el interés urbano" de las actuaciones. Toscano, por su parte, agradeció la receptividad de la Consejería sobre esta propuesta "que soluciona un problema más allá de una demanda vecinal" e hizo hincapié en la necesidad de un estudio técnico para dar solución al "tráfico y la permeabilidad" de esta zona.
En resumen, el plan de adaptación de la Autovía de Utrera está encaminado a facilitar los accesos y reducir las altas velocidades, fomentando un tráfico "más amable", según Gutiérrez, a la vez que ampliar su capacidad. Según el protocolo firmado, la transformación de este tramo de la A-376 persigue una triple función: canalizar los tráficos metropolitanos con un carácter multimodal, integrando en este eje además del tráfico rodado, el transporte público y el autónomo (a pie o en bici).
Asimismo, facilitará la integración urbana en el tramo que discurre por la zona de Los Quintos, en Dos Hermanas, con el anunciado soterramiento, y se facilitará el acceso de forma preferente a la estaciones de la línea 1 del Metro de Sevilla en la zona (Montequinto y la Universidad Pablo de Olavide), así como a las de Cercanías y otros intercambiadores.
Para ello, el rediseño de la A-376 se proyecta como un bulevar, con paseos peatonales, carril bici, plataformas reservadas al transporte público e intermodalidad con las estaciones del suburbano y del tren.
