Es Viernes de Dolores en Sevilla, y a poco de dar comienzo la Semana Santa, se desata una cadena de sucesos misteriosos. Pablo, un adolescente madrileño, viaja con su hermana pequeña y su abuelo a la capital andaluza para visitar a unos familiares. Sin esperarlo, el joven se encuentra en medio de una serie de mensajes secretos teniendo como última meta la revelación de una Verdad hasta ahora oculta acerca de la Semana Santa. Su primo Juan y los amigos del grupo joven de una hermandad le acompañan en esta búsqueda incesante a través de la historia y las costumbres de las hermandades y las cofradías sevillanas. Toda la secuencia de pistas y otros acontecimientos inesperados conducen a Pablo a un final que lo dejará sin aliento.
Este es el argumento de ‘Despertar Cofrade’, la primera novela de Cristina Medina Muñoz, que acaba de llegar a las librerías publicada por la editorial Punto Rojo Libros. Nacida en Sevilla en el año 1980, y residente en el barrio de Triana, la autora está licenciada en Pedagogía y lleva años vinculada a la Orientación educativa y logopedia escolar, colaborando en diversas publicaciones, tanto cofrades como relacionadas con el mundo de la Psicopedagogía. Casada y madre de dos niñas, se declara lectora infatigable y ferviente defensora de las costumbres y tradiciones de la ciudad que la vio nacer y crecer, especialmente de la Semana Santa, la cual considera el bastión más importante que atesora Sevilla.
De inicio llama la atención el título de la obra. ¿Cómo se te ocurrió?
Bueno, se me ocurrieron varios, la verdad. Una tarde de verano, hablando con mi marido de la novela, el título surgió solo. Y es que en realidad la trama tiene que ver con eso, «despertar en la Semana Santa»; además, después de los tiempos de pandemia que hemos vivido, todos hemos tenido que despertar en algún sentido.
Otro detalle que salta a la vista es el protagonismo que concedes a tu hermandad del Cachorro, aunque también dedicas varias páginas a las del Gran Poder, la Esperanza de Triana o la Macarena.
El Cachorro es una imagen muy evocadora, muy potente, es inspiración pura; además tenía que recrear la vida de un grupo joven concreto y era una manera de revivir unos años que para mí fueron maravillosos. El Gran Poder, la Macarena y la Esperanza de Triana, entre otras muchas advocaciones de honda devoción en la ciudad, tenían que estar necesariamente, al fin y al cabo es una novela que tiene como telón de fondo la devoción de Sevilla.
Más allá de su evidente didactismo, ‘Despertar Cofrade’ es un ejercicio lúdico en el que los protagonistas deben ir hallando pistas para resolver un misterio. ¿Crees que con estos ingredientes te resultará más sencillo enganchar a los jóvenes?
Esa ha sido la intención, ofrecer misterio y enigma. He intentado contarla de otra manera, desde otra perspectiva, relatar la Semana Santa a través de continuas pinceladas mientras se desarrolla la trama principal.
Ya en los primeros capítulos observamos una clara intención por reflejar no solo la estética de la Semana Santa de Sevilla sino también sus ritos, su liturgia o su gastronomía.
Es que yo entiendo la Semana Santa así, como un todo, la estética, la imaginería, la devoción, los ritos, la música, las experiencias y las vivencias personales. Incluso la gastronomía también forma parte sin duda de nuestro universo cofrade. Todas estas cosas, unas más tangibles y físicas y otras más inmateriales y emocionales, constituyen la Semana Santa, quizá por ello es única y particular para cada sevillano.
Tanto los personajes sevillanos como el protagonista madrileño, Pablo, son retratados de manera naturalista, con un lenguaje cercano y alejado de los tópicos donde no falta el humor. Háblanos de ellos.
He intentado que hubiese variedad de perfiles en los personajes, era importante conceder naturalidad, algo fundamental para que los lectores se identificaran con ellos y se involucraran en la historia. Muchas personas me han dicho que se sienten reflejadas con uno o con otro personaje. He de decir que son todos personajes inventados, no me he basado en nadie en concreto, solo he tomado prestado los nombres de mis hijas y mis sobrinos mayores para las figuras más protagonistas.
Uno de los aspectos más importantes de la vida diaria de las hermandades es la priostía, algo poco tratado en las novelas. Sin embargo, tú lo conoces de cerca...
Yo he tenido poca participación directa en la priostía, no obstante es un ámbito de la hermandad que me ha tocado de cerca de una o de otra forma; tuve la oportunidad de estar muy cerquita de la Virgen del Patrocinio cuando fui auxiliar de camarera, también por mi padre, quien desempeñó el cargo de prioste segundo, y también por mi marido, que colaboró con la priostía de la hermandad de forma continuada durante bastantes años.