Los medios y los días

“El Director”, descubriendo la rueda

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06 oct 2019 / 07:23 h - Actualizado: 06 oct 2019 / 06:23 h.
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  • Imagen de la portada de ‘El Director’ de David Jiménez.
    Imagen de la portada de ‘El Director’ de David Jiménez.

Se ha presentado en Sevilla el libro El Director del exdirector de El Mundo David Jiménez, a quien hay que agradecerle su valentía al convertirse en fuente primaria de información para el público en general porque de esa manera se convierte en una prueba empírica de lo que muchos estudiosos del tema venimos denunciando desde hace décadas: que el periodismo y por tanto los periodistas se ven limitados en su trabajo por lo que he denominado la Teoría de las 6 P: Propiedad del medio, Publicidad, Política, Producción de la noticia, Públicos y Periodismo.

Les aclaro. Propiedad: los medios más influyentes son de la banca, de fondos de inversión y de capitales extranjeros (mexicano, catarí, italiano, inglés, estadounidense, francés, japonés, chino, ruso...). Estos propietarios no se dedican sólo al negocio de la comunicación y el periodismo, sino que abarcan casi todos los sectores de la producción con lo cual llegamos a la Publicidad de la que dependen los medios de comunicación tanto de papel como digitales. Una de las diferencias es que antes se vendía papel, sobre todo papel, y ahora permanencia en el sitio web de los medios digitales, es algo así como esa vulgaridad que dicen algunos presentadores de TV: “Vamos a publicidad, pero no se muevan de ahí que volvemos enseguida”. Pretenden que te tragues los mensajes de la publicidad que te modelan la mente con un mundo falso y con atentados contra la dignidad de la mujer, los niños, la familia en general, montones de faltas y delitos pasan ante nuestras narices y como mucho a sus proyectores les cae una multa al final del ejercicio correspondiente.

Política. Si un periodista en una rueda de prensa hace preguntas molestas a un político que es del mismo partido de la empresa en el que ese periodista trabaja, tendrá problemas. Los periodistas –cada vez más jóvenes e inexpertos porque han echado a la calle a los expertos- se convierten así en simples correveydiles. Berlusconi puede ser hoy un magnate de la prensa y otros muchos negocios y mañana el primer ministro de Italia. En EEUU la FCC (Federal Communications Commission) que es la encargada de que no exista concentración mediática en el país, está controlada desde la Casa Blanca y a partir del mandato de Reagan no ha hecho más que estimular la concentración mediática, algo copiado por el resto del planeta.

Producción de la noticia. El periodista, en general, ocupa tres o cuatro puestos de trabajo en uno, es un esclavo de la pantalla, no tiene apenas fuentes propias con lo cual el periodismo ha perdido muchísima calidad y han aparecido fenómenos como las noticias anzuelo que son esos titulares misteriosos que usted encuentra en los medios digitales para que siga navegando por curiosidad y cuando se da cuenta lleva ya una hora sin salir del mismo sitio. El periodista es captador de información, redactor, corrector, maquetador, documentalista... pero solo cobra por una de estas tareas y con frecuencia mal o no cobra.

Periodismo. El periodista experimenta con frecuencia una especie de síndrome de Estocolmo y aunque haya sufrido censuras y, sobre todo, autocensuras, niega que reciba presiones y defiende más a su empresa que al periodismo. Claro, tiene que comer, él y, a poder ser, su familia. Eso se llama, como saben, espiral del silencio, aplicada al periodismo, porque existe en toda la sociedad y se resume en lo que me decía mi madre: “Niño, tú no te señales”. Sevilla es una ciudad en la que hay que señalarse poco o nada, por eso sigue en el estado de atraso en el que está.

Cuando a Pablo Iglesias se le acabó la baja paternal e irrumpió diciendo que los medios eran de los bancos se armó la de Troya. Como en mi equipo de investigación llevamos decenios investigando el tema, uno de mis colegas me envió un mensaje al móvil que decía con retranca: “Ahora se enteran de que los medios son de los bancos”. Aquí se descubre todos los días la rueda. Desde los años 70, con el Informe sobre la Información que Manuel Vázquez Montalbán empezó a escribir desde la prisión franquista, empezó esta movida que se ha ido incrementando con el tiempo. Es una dictadura totalitaria del mercado la que sufre el periodismo y académicamente está demostrada. ¿Qué puedo hacer entonces para estar informado?, me pregunta el personal tras mis charlas, conferencias o clases. Sencillo pero difícil: lea un diario de diarios, de todas las tendencias, ahora ya es posible con la Red, el pluralismo auténtico está en la Red, no en los quioscos. Y otra cosa: siempre que esté usted recibiendo periodismo pregúntese quién le está informando porque de eso dependerá el enfoque de la noticia. Quién no es sólo la persona que habla sino todo lo que tiene detrás de ella.

Claro que toda esta dinámica es asunto de unos pocos porque es complicada y los Públicos –la sexta P- buscan que les digan lo que quieren que les digan sin meterse en complicaciones, He ahí por qué son otro problema para los periodistas que deben hacerles la pelota para que sigan siendo clientes. Por eso, porque informarse cuesta un buen esfuerzo –decía en 1995 Ignacio Ramonet- hay ciudadanos de primera y de segunda y de tercera (eso ya lo digo yo). Por eso, la democracia no es más que un mal necesario, como sostenía Nietzsche.